KPS financia la compra de la antigua Mivisa con un crédito de 1.175 millones
Emite bonos por 375 millones al 5,125%
KPS ultima la financiación para hacerse con la división europea de envases alimenticios de Crown Holdings, que incluye la antigua Misiva. El fondo de capital riesgo ha colocado entre inversores especializados un crédito de 1.175 millones con el que prevé financiar la operación.
KPS se alzó como ganador de la puja que organizó el gigante norteamericano Crown Holdings para desprenderse de su división europea, que construyó sobre los cimientos de la española Mivisa. La operación valoró la compañía en 2.250 millones. KPS obtendrá el 80% y Crown retendrá el 20% restante.
El fondo de capital riesgo –una vez ha obtenido una larga lista de autorizaciones en materia de competencia– se dispone ahora para lograr la financiación necesaria para acometer la operación. Ha rubricado un préstamo a siete años por 1.175 millones de euros, que ha colocado entre inversores institucionales, en lo que se conoce como TLB. Ha conseguido colocar el crédito entre inversores a un precio de euríbor más un diferencial de 375 puntos básicos.
Con esta deuda, el comprador consigue refinanciar el pasivo que arrastraba la filial, así como financiar una parte de la adquisición. También obtiene de la banca una línea de liquidez de 275 millones que expira en
Barclays y Deustche Bank son los coordinadores globales de la operación. BNP Paribas, Crédit Agricole, Crédit Suisse, MUFG, Rabobank, UBS y Unicredit han trabajado por debajo.
Además de este préstamo, KPS –que organiza todos los activos adquiridos a Crown en la sociedad Titan– ha rematado la financiación de la operación con una emisión de bonos. Ha colocado 375 millones a un cupón del 5,125% y con vencimiento en 2029. Deutsche Bank y Barclays, que fue el asesor de KPS en la venta, han pilotado también esta colocación. Evercore trabajó como asesor de Crown en la operación.
Agencias de rating
Fitch –que le ha otorgado una calificación de CCC+, hasta siete escalones por debajo del grado de inversión– alerta del alto endeudamiento de la firma. Calcula que la compañía contará con una deuda de 1.900 millones, lo que supondrá un endeudamiento de 9 veces, con un ebitda de 320 millones y unos ingresos de 2.000 millones. Espera que la compañía reducirá paulatinamente hasta las 7,2 veces en 2024.
La agencia alerta también de su limitada diversificación geográfica, dado que se concentra únicamente en Europa, donde es el líder en embalases alimenticios. La producción de latas para alimentos en Europa supone el 85% de su ebitda, pero se beneficia de la resistencia que ha mostrado este sector en momentos de zozobra económica, como la crisis derivada del Covid-19. También alerta de una rentabilidad y una eficiencia por debajo de sus principales competidores, por lo que Fitch no prevé que la compañía se embarque en operaciones de M&A o pague dividendo hasta que alcance un margen ebitda de entre el 15% y el 16% antes de 2024.
En cuanto a Moodys, calcula un endeudamiento de hasta 7,5 veces. Juzga como positiva la posición financiera de la compañía y tilda como “moderados” los riesgos medioambientales de la firma. La exposición a un negocio en el disparadero por su complicado encaje con las preocupaciones medioambientales, como es la fabricación de envases de un solo uso, hizo que algunos fondos no llegasen a participar en el proceso de venta, en el que sí entraron Lone Star, Onex o Platinum. Moodys considera que su mayor riesgo en este sentido es el consumo de energía y agua, pero apunta a las mejores perspectivas de los envases metálicos en el reciclaje que los de plástico. También apunta a que los fabricantes de envases han sido los que mejor han resistido la crisis del Covid-19. No en vano al tiempo que Crown vendía Mivisa, Carlyle colocaba el fabricante de envases de plástico Logoplaste al fondo canadiense OTPP.
Una compañía con historia en el capital riesgo
Crown Holdings adquirió Mivisa en 2013 a Blackstone y Dinamia –el negocio de private equity de N+1, actual Alantra– por 1.200 millones. Ellos se lo habían comprado en 2011 al propio CVC, y este en 2004 a un consorcio formado por Pai Partners y Suala Capital (un fondo entonces pilotado por Ana Botín), que compraron la firma a la familia Vivancos, que fundaron Mivisa en 1974. Crown decidió desprenderse de Mivisa y del resto de su negocio de envases alimenticios en Europa a finales del año pasado, cuando contrató al banco de inversión Evercore para pilotar la operación. En un principio establecieron una negociación bilateral con CVC, que quedó en agua de borrajas. Finalmente lanzó una subasta donde participaron Lone Star, Onex o Platinum, además del ganador, KPS. La compañía tendrá ahora su sede en Suiza.