Foodiverse, las ensaladas de Mercadona, mira al exterior tras vender 311 millones en 2020
Foodiverse redujo un 4% los ingresos por el menor tirón de los listos para comer
Foodiverse, la compañía alimentaria valenciana antes denominada Grupo Alimentario Citrus, cerró el ejercicio 2020 con una facturación de 311 millones de euros, cifra que representa un descenso del 4% respecto al año anterior.
El grupo, que provee a Mercadona de sus ensaladas de cuarta gama o listas para comer, sufrió una caída de la demanda precisamente en este tipo de productos ya preparados, habitualmente ligados a momentos fuera del hogar por su facilidad de consumo, algo que la pandemia y el confinamiento estricto vivido entre marzo y mayo del año pasado limitaron.
Esta, pese a todo, siguió siendo la principal fuente de ingresos del grupo. Las ventas en este segmento fueron de 190,6 millones, un 14% menos que en 2019. En ese año este tipo de productos preparados, desde ensaladas a zumos, llegaron a facturar 222 millones. Desde 2016 y hasta el cierre de 2020, esta línea de negocio ha crecido un 50% y ha sido el principal motor de crecimiento de Foodiverse, cuya facturación del ejercicio pasado está un 30% por encima de la que generaba hace cinco años.
El mayor consumo dentro del hogar provocó un incremento del 23% en las ventas del segmento agrícola, es decir, productos vegetales que proceden del campo sin ser transformados. Estos generaron unos ingresos de 93,6 millones, la mayor cifra del último lustro, tras vender 90.000 toneladas de producto.
Foodiverse lleva a cabo su actividad productora a través de la filial Agromediterránea, en una superficie agrícola total de 4.000 hectáreas en el sureste de España y Canarias, y con un centro de procesado en Dolores de Pacheco (Murcia). La compañía alcanza las 500 referencias de estos productos que son despachadas a sus clientes de la distribución.
La tercera pata del negocio de Foodiverse es la compuesta por las áreas de alimentación infantil y alimentos de base vegetal, cuyas ventas totales fueron de 25,3 millones, un 2,6% menos que en el año anterior. “La pandemia y sus consecuencias han supuesto un gran reto a nivel mundial, generando cambios en los hábitos de consumo durante los confinamientos y debido a las distintas restricciones”, valora el consejero delegado de Foodiverse, Rafael Boix.
Internacional
La compañía, que cambió su denominación durante el año pasado para tener una mayor proyección internacional, elevó el peso de las ventas fuera de España durante el año pasado. Estas representaron el 41,3% de la facturación total, 1,5 puntos más que en 2019. En 2018 ese porcentaje era del 28%.
“Nuestra prioridad para los próximos años es la expansión internacional y la diversificación de clientes y mercados”, explican desde la compañía. Hasta ahora el gran salto en esta estrategia lo dio entre 2018 y 2019, cuando adquirió la compañía alemana Thurländer Salate, la suiza Josef Müller Gemüse y la italiana Novanatura. Entre ellas ha sumado una facturación conjunta de 80 millones a su negocio.
Foodiverse cuenta con más de 200 clientes y está presente en 30 mercados. Tras esas adquisiciones Alemania, Suiza e Italia son sus fuentes principales de ingresos fuera de España.