Euskaltel congela la venta de su red de fibra ante la opa de MásMóvil
La desinversión del 49% de este activo había llegado a su fase final y ahora se dilatará hasta finales de año
La opa de MásMóvil sobre Euskaltel trae víctimas colaterales. Una de ellas es el proceso de venta de la fibra óptica de Euskaltel, que queda suspendida temporalmente hasta que culmine la oferta de su competidor.
Euskaltel lanzó el año pasado un proceso para buscar un socio que adquiriese el 49% de su red de fibra, una operación similar a la que realizó MásMóvil en 2019. Lazard es el coordinador del proceso, que valoraba la red de fibra en unos 1.000 millones.
Quedaron como finalistas de este proceso Infravia, First State y Fiera Capital. Poco a poco, el proceso fue perdiendo el interés de los inversores, debido al elevado precio y a los contratos por uso que la operadora pretendía firmar con el dueño de la fibra. First State abandonó el proceso e Infravia se quedó como potencial favorito.
El objetivo era cerrar el proceso antes de verano. Pero la opa de MásMóvil se metió en medio.
Según el anuncio de la opa, Euskaltel y de MásMóvil han pactado no “aprobar o suscribir cualquier acuerdo que comporte la enajenación, disposición o aportación de activos de infraestructura del grupo Euskaltel por un valor, en conjunto de más de cinco millones”.
El reglamento español de opas también complica una venta de activos. Regula el llamado “deber de pasividad”. Es decir, impide que el consejo de administración de una empresa que es la diana de una opa pueda emitir nuevas acciones o bonos, proceder a la venta de activos o acordar el pago de nuevos dividendos.
La única alternativa que podría salvar el proceso de la fibra de Euskaltel es un pacto con MásMóvil que permitiese esta venta, que además ya estaba en los planes antes de la opa. Sin embargo, las fuentes consultadas consideran que será MásMóvil la que decida qué hacer con este activo.
