Los socios podrán enviar sus planes de recuperación a Bruselas a partir de este viernes
La Comisión confía en empezar a transferir los fondos a los Estados miembros en el mes de junio
Los países de la Unión Europea (UE) podrán empezar a enviar a la Comisión sus planes de inversión y reformas vinculadas al fondo de reconstrucción comunitario a partir de este mismo viernes, tras la entrada en vigor de la regulación definitiva del Next Generation UE, que ha sido aprobada recientemente por el Parlamento Europeo y el Consejo.
Una vez que haya recibido la documentación correspondiente, el Ejecutivo comunitario tendrá dos meses para evaluar los planes antes de pasarlos al conjunto de países, que deberán dar luz verde por mayoría cualificada a cada proyecto en el plazo de 30 días. Con todo, las capitales tendrán hasta finales del mes de abril para poder enviar sus propuestas, dando pie a un calendario que situaría a comienzos de verano el desembolso de los primeros pagos.
En efecto, en el mejor de los casos, el Ejecutivo comunitario espera realizar las primeras emisiones de deuda para financiar el fondo a partir del mes de junio, siempre y cuando los países, además de haber enviado sus planes, hayan ratificado para entonces la legislación que le permitirá acudir a los mercados para endeudarse.
De momento, solo seis lo han hecho, aunque "muchos están avanzados en el proceso. Llamamos a los restantes a avanzar rápido", ha explicado el vicepresidente económico de la Comisión, Valdis Dombrovskis, tras la reunión de ministros de Economía y Finanzas de la UE. "Esperamos empezar las primeras emisiones ya en verano, pero esto depende de que todos los Estados miembros ratifiquen la decisión de recursos propios", ha añadido.
El ministro de Finanzas de Portugal, Joao Leao, cuyo país preside el Consejo de la UE este semestre, también confía en que todos los Estados hayan completado este proceso "en abril" para que la Comisión pueda emitir en verano.
El Next Generation UE movilizará un total de 750.000 millones de euros entre subvenciones directas y préstamos a devolver que se irán transfiriendo a los países hasta el año 2026, principalmente durante el periodo 2021-2023.
La idea de Bruselas, ha recordado Dombrovskis, es que cada país reciba una primera asignación de los fondos que tiene comprometidos nada más aprobarse su plan de inversión y reforma. "La idea inicial sería tomar prestado el 13% de financiación por adelantado para los Estados miembros", dijo el vicepresidente comunitario, una cifra que en el caso de España alcanzaría los aproximadamente 10.000 millones de euros.
El plan de recuperación español, según han ido explicando en las últimas semanas varios portavoces del Ejecutivo comunitario y la propia ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, es uno de los más avanzados de toda la UE. Según recordó ayer la propia Calviño antes de la reunión del Eurogrupo (los ministros del ramo de la zona euro), desde el pasado mes de octubre se ha embarcado en un "diálogo constante con la Comisión para afinar los detalles". Aunque aún quedan unos pocos flecos por atar, el Ejecutivo espera poder enviar su proyecto a lo largo del mes de marzo.