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Análisis
Exposición didáctica de ideas, conjeturas o hipótesis, a partir de unos hechos de actualidad comprobados —no necesariamente del día— que se reflejan en el propio texto. Excluye los juicios de valor y se aproxima más al género de opinión, pero se diferencia de él en que no juzga ni pronostica, sino que sólo formula hipótesis, ofrece explicaciones argumentadas y pone en relación datos dispersos

Una hoja de ruta frente al cambio climático en España y el mundo

Ayudaremos a las regiones cuyas economías pueden verse afectadas al dejar atrás el consumo intensivo de energía

España es uno de los países europeos más afectados por el cambio climático. Las temperaturas están subiendo más rápido que la media mundial y la amenaza de olas de calor, sequías, inundaciones e incendios es permanente. No existe una solución fácil, pero existe un camino seguro para afrontar este reto: la hoja de ruta del Banco del Clima.

Nuestra organización ha preparado este plan para responder al desafío del calentamiento global y reflejar nuestro firme compromiso de contribuir al cumplimiento de los objetivos establecidos en el Acuerdo de París y en el Pacto Verde Europeo. Creo firmemente que Europa será el primer continente en lograr la neutralidad en emisiones de carbono para 2050, y la hoja de ruta es un paso definitivo en esa dirección. Debemos actuar rápidamente y reorientar los diferentes sectores de la economía.

Nuestro papel en España ya es significativo. En 2019, el grupo proporcionó casi 9.000 millones de euros para financiar 92 proyectos y España fue nuestro segundo mayor cliente. Cerca del 30% de este volumen de financiación se dedicó a la acción por el clima, con un aumento del 75% frente al año anterior, alcanzando los 2.240 millones de euros.

Sin embargo, la emergencia climática y medioambiental exige más ambición. Nuestro plan prevé grandes cambios en la forma en que financiamos los proyectos, evaluamos el riesgo y apoyamos la innovación y la transición progresiva y sostenible hacia una economía baja en carbono. Dejaremos de financiar proyectos basados en combustibles fósiles y dedicaremos más financiación a las energías renovables y a las tecnologías de vanguardia.

Para hacer frente al cambio climático en todo el mundo harán falta billones de euros de inversión. Es un camino que implica riesgos y costes a corto plazo, pero mantener nuestro modelo económico actual sería infinitamente más gravoso a largo plazo.

La hoja de ruta es una señal inequívoca del esfuerzo conjunto de nuestra organización y la UE en la lucha contra el cambio climático. Intensificaremos nuestra labor en materia climática para apoyar un billón de euros en inversiones relacionadas con el clima y el medio ambiente durante los próximos diez años. Aumentaremos la proporción de nuestra financiación destinada a estos objetivos del 30% actual a más del 50% para 2025.

Esta financiación será vital si España quiere alcanzar el objetivo de obtener el 74% de su electricidad de fuentes renovables para 2030, y el 100% para 2050. De esta forma, España podría reducir sus importaciones de energía en al menos un 15% durante la próxima década, ahorrando más de 75.000 millones de euros en importaciones de combustibles fósiles.

La hoja de ruta del Banco del Clima orienta nuestro apoyo hacia proyectos más sostenibles, mediante la puesta en marcha de nuevos productos de inversión y servicios de asesoramiento de alta calidad. Nos centraremos en la energía limpia, en las tecnologías más innovadoras y en la digitalización para modernizar nuestras economías y mejorar el crecimiento inclusivo y la competitividad sostenible.

La hoja de ruta del Banco del Clima también tiene una dimensión social fundamental. Nos comprometemos a ayudar a las regiones cuyas economías pueden verse afectadas al dejar atrás las industrias de consumo intensivo de energía. Destinaremos más recursos a una transición justa que ofrezca formación, empleo y apoyo a las personas cuyos medios de vida deban cambiar a medida que avance la transición hacia una economía más verde.

También aumentaremos nuestro apoyo a países en desarrollo que se esfuerzan para adaptarse al cambio climático. Sequías más graves, aumento del nivel del mar, pérdida de biodiversidad y otros efectos constituyen un riesgo para el suministro de alimentos y agua, y hacen que la vida sea más peligrosa en estas frágiles zonas del mundo.

Hace cinco años, durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Clima celebrada en París en 2015, nos comprometimos a aportar financiación por valor de 20.000 millones de dólares anuales durante los siguientes cinco años para hacer frente a la emergencia climática. Nos encontramos bien encaminados para superar ese objetivo. Desde 2012 hemos proporcionado 170.000 millones de euros de financiación para la acción por el clima, que han movilizado más de 600.000 millones de euros destinados a proyectos que reducen las emisiones de gases de efecto invernadero y ayudan a los ciudadanos a hacer frente al cambio climático.

Los próximos años representan un gran paso hacia delante. Estamos trabajando para proteger el futuro. No tenemos tiempo que perder. Es el momento de demostrar que estamos a la altura de este desafío. ¡El futuro comienza ahora!

Ricardo Mourinho Félix es vicepresidente del Banco Europeo de Inversiones

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