Google completa la compra de Fitbit pese a que EE UU sigue investigando la transacción
Reitera que el acuerdo siempre se centró en los dispositivos de Fitbit y no en los datos de sus usuarios y dice que el periodo de espera acordado con el Departamento de Justicia de EE UU expiró sin su objeción
Google ha anunciado este jueves que ha completado la operación de compra de la compañía de tecnología para el deporte y la salud Fitbit, una operación valorada en unos 2.100 millones de dólares. La transacción, que fue anunciada por el gigante de internet en 2019, se ha materializado pese a que las autoridades de EE UU han comunidado que continúan su investigación para ver sus posibles efectos en la competencia. Tampoco Australia la ha aprobado.
La multinacional recibió el mes diciembre el visto bueno de los reguladores europeos tras aceptar una serie de compromisos para garantizar que la adquisición no reforzaba más el dominio de la empresa estadounidense en el mercado de la publicidad digital, dada la posibilidad de que usase datos de Fitbit para ayudar a personalizar los anuncios.
El Departamento de Justicia (DOJ) de EE UU, que demandó a Google en octubre por presuntas prácticas contra la competencia, aseguró hoy que "no ha llegado a una decisión final" respecto a la operación. "Hemos cumplido con la extensa revisión del DOJ durante los últimos 14 meses y el periodo de espera acordado expiró sin su objeción", aseguró un portavoz de Google. "Seguimos en contacto con ellos y estamos comprometidos a respender a cualquier cuestión adicional que se nos plantee". añadió.
En un comunicado, Google ha informado sobre la finalización de la compra y ha reiterado que el acuerdo siempre se centró en los dispositivos de Fitbit y no en los datos de sus usuarios. Algo que ha mantenido desde el principio. "Hemos trabajado con los reguladores globales en un enfoque que salvaguarda las expectativas de privacidad de los consumidores, incluyendo una serie de compromisos vinculantes que confirman que los datos de salud y bienestar de los usuarios de Fitbit no serán usados en anuncios de Google y que estos datos serán separados de otros de Google", señaló la empresa.
Los compromisos acordados con Bruselas también garantizan la interoperabilidad entre relojes de firmas competidoras Android y cómo los usuarios podrán seguir compartiendo datos sobre salud y deporte si quieren hacerlo.
Con Fitbit, fundada en 2007 y una de las pioneras en este mercado, Google se hace con una de las mayores empresas en el mercado de las aplicaciones y dispositivos vinculados a la actividad física y de medición del ritmo cardíaco, pasos, calorías quemadas y distancias recorridas, entre otras variables. Y tras la compra entra a competir con compañías como Apple, Huawei o Xiaomi, que también disponen de relojes y pulseras para medir la actividad física y datos de salud.