_
_
_
_

Apple prepara cambios en la TouchBar de sus MacBook Pro, ¿cuáles?

Quiere añadir una mayor interacción al utilizarla.

MacBook Pro de Apple.
MacBook Pro de Apple.Unsplash

Apple no es muy amiga de cambiar las cosas de forma radical, y por eso suele mantener los diseños de sus ordenadores a lo largo de periodos de cuatro o cinco años, aproximadamente. Es en esos momentos de transición cuando aparecen trackpads más grandes, o nuevos puertos de conexión y, por qué no, grandes mejoras como la de la presencia de la famosa TouchBar.

Este componente es una superficie táctil que recorre toda la parte superior del teclado de los MacBook Pro y que ofrece al usuario una serie de accesos directos de fácil pulsación que nos evita tener que mover el ratón por la pantalla: un botón de aceptar, unas opciones de selección de formato en Photoshop o una forma más rápida de cancelar una transmisión en vídeo sin tener que ir al mismo control que aparece en la pantalla.

Llegan novedades a esas TouchBar

El caso es que Apple está trabajando en mejorar un pelín más el rendimiento de esa TouchBar y ha pensado que sería una buena idea traer a la vida una tecnología que ya enterró hace un par de años cuando aquel Force Touch de las pantallas de los Apple Watch y iPhone se desestimó por la falta de interés por parte de los usuarios, que no aprovechaban ese toque de fuerza para abrir nuevos menús, opciones y accesos directos de las apps.

TouchBar de los MacBook Pro de Apple.
TouchBar de los MacBook Pro de Apple.Unsplash

El caso es que los de Cupertino han registrado una patente en la que añaden ese Force Touch a la TouchBar de tal forma que no solo podamos controlar los programas desde allí tocando los botones que nos muestra, sino sintiendo que lo estamos haciendo al tocar la minipantalla. Además, estaría especialmente pensado para esos menús con tiradores que arrastramos de un lado a otro, como el de subir y bajar el volumen, o el brillo, en los que esa vibración podría indicarnos casi sin mirar si estamos subiendo o bajando.

Sea como fuere, estamos ante una patente que más tarde podría ser utilizada, o no, por Apple, por lo que tendremos que esperar para ver si los incorporan en los futuros modelos de MacBook Pro. Gama que, como todas las demás, va a sufrir cambios profundos en los próximos años por la llegada de esos nuevos procesadores M1 de la propia Apple, que se ha decidido a dejar atrás los chips de Intel en favor de unos propios con una arquitectura ARM diametralmente opuesta y que ya está obligando a los desarrolladores a convertir todas sus apps en un tiempo récord.

Más información

Archivado En

_
_