Wall Street cae más del 3% arrastrado por el Nasdaq y las grandes tecnológicas
El Ibex cierra plano tras llegar a subir un 2%
Comenzó con buen pie, mejoró a lo largo de la sesión y firmó un cierre mediocre. Este es el resumen de la sesión de la Bolsa española de este jueves. El Ibex ha terminado con una escueta subida del 0,13%, hasta los 7.006 puntos. Ha recuperado la cota de los 7.000 puntos, sí, pero en una sesión de más a menos que pone en entredicho que pueda mantener el nivel a medio plazo. Esta vez, la banca, el turismo y Telefónica han sido los artífices de la minúscula alza.
El culpable del cierre casi plano ha sido Wall Street. El Dow Jones ha caído un 2,78% y el S&P, un 3,46%. Pero la peor parte se la lleva el Nasdaq, que ha cedido el 4,96%.
Estas sonoras caídas han estado protagonizadas por las grandes tecnológicas estadounidenses. Las mismas que han sido las responsables de los máximos de la Bolsa de Nueva York en los últimos meses. Amazon y Alphabet (matriz de Google) se han dejado casi el 5%, mientras que los retrocesos han alcanzado el 6,28% en Microsoft y el 7,93% en Apple. Facebook se ha quedado en el 3,7%.
Los analistas consultados señalan que el descalabro de Wall Street no es más que una corrección, después de que el Nasdaq haya estado marcando máximo tras máximo en las últimas sesiones. Tesla, que se dispara un 400% en el año, caía con fuerza. Bank of America ha advertido de que su objetivo para el S&P 500 está en 3.250 puntos, muy por debajo del nivel actual, que ronda los 3.500, y los republicanos han reconocido que el acuerdo para un nuevo plan de estímulos sigue bloqueado. La tormenta perfecta que ha hecho naufragar a las pequeñas Bolsas europeas.
La banca ha sido hoy la tabla de salvación del selectivo español. El FTSE británico ha caído un 1,52%; el Dax alemán, un 1,4%; el Cac francés, un 0,44%, y el Mib italiano, un 1,54%.
IAG ha liderado las alzas con un 5,32%. Le han seguido los bancos, con Sabadell, que sumado un 2,92%, Bankia (+2,42%), CaixaBank (+2,22%), BBVA (+1,97%) y Santander (1,03%). También han destacado Meliá (+2,86%) y Telefónica (+1,93%). Los perdedores han sido los ganadores de las últimas sesiones. Siemens Gamesa ha caído un 3,42% y Cellnex y ArcelorMittal, un 2,9% en ambos casos.
Los nuevos estímulos fiscales anunciados por Francia y, tras conocerse unos malos PMI de servicios, la posibilidad de nuevas medidas por parte del Banco Central Europeo (BCE) para frenar la reciente escalada del euro, que afecta negativamente a las exportaciones de la región, llevó a las Bolsas europeas a escalar alrededor de un 2%. El Ibex llegó a subir un 2,33% y tocar los 7.160 puntos. Pero la apertura indecisa de Wall Street, que después se tradujo en una fuerte caída debido a las tecnológicas, puso el punto final a la fiesta en Europa.
El BCE vigila el euro
El mercado empieza a sospechar que el BCE podría intervenir la semana que viene: aunque el euro ha cedido terreno frente al dólar en las últimas sesiones, la moneda única tocó máximo de más de dos años en los 1,20 dólares a comienzos de semana y se revaloriza un 13% desde los mínimos de marzo.
La fortaleza de la moneda única se mantiene en el foco de los inversores como un factor que puede lastrar a grandes compañías exportadoras, en un momento en el que la zona euro trata de recuperar una economía duramente golpeada por el coronavirus. Los tambores de intervención del BCE han llevado al euro a marcar un mínimo de 1,1789 dólares, aunque después las caídas se han moderado al 0,21%, con el euro en los 1,1830 billetes verdes.
Los responsables de la institución presidida por Christine Lagarde están preocupados por la apreciación del euro y lo vigilan de cerca, según una información del Financial Times recogida por Bloomberg. Desde Renta 4, Natalia Aguirre, sostiene que es más probable una intervención verbal de Lagarde para frenar la divisa que medidas adicionales. "No creo que haya novedades a nivel de estímulos, es pronto. Pienso que el BCE agotará su programa especial de compra de deuda y adoptará una actitud de esperar y ver", destaca Aguirre, que opina que las palabras de Lagarde podrían echar el freno a la divisa sin necesidad de hacer nada más.
Igualmente, en Monex Europe aseguran que Lagarde podría desincentivar verbalmente el avance del euro. "El panorama de datos económicos es mixto" y "el complejo contexto de recesión, unido a la rampante evolución del euro, que puede desincentivar la actividad exportadora europea, serán temas agudamente evaluados por los inversores en la próxima presentación del BCE la semana entrante". La firma recuerda que el miembro del BCE, Philipe Lane, adelantó ayer que “el par euro-dólar importa”, sugiriendo que la institución no se quedará de brazos cruzados ante la apreciación sostenida de la moneda.
Además, los PMI de la zona euro muestran cómo los rebrotes enfrían la recuperación económica. Esto se suma a la baja inflación, que volvió a tasas negativas en agosto. Mientras el PMI de China ha superado las expectativas, los PMI de la zona euro constatan que la recuperación pierde fuelle, con España a la cola. El crecimiento de la actividad del sector privado de la zona euro se ralentizó en agosto hasta perder casi todo el ímpetu mostrado tras el final del confinamiento ante la preocupación por los rebrotes de la Covid-19, según los indicadores adelantados, que sitúan a Italia y España a la cola de la reactivación económica en Europa. En España, la actividad de las empresas españolas volvió a entrar en agosto en territorio recesivo.
Deuda y petróleo
En la deuda, el rendimiento del bono español a 10 años bajó 0,005 puntos porcentuales, hasta el 0,326%, y en el año acumula un descenso de 0,142 puntos porcentuales. En Italia, la deuda al mismo plazo se mantuvo casi sin variaciones, con un interés del 0,975%. Mientras, la rentabilidad negativa del bund alemán a una década se acrecentó ante el miedo desatado en la renta variable durante la recta final de la sesión. Su rendimiento está en el -0,488% frente al -0,473% del miércoles.
En el mercado de materias primas, el barril de petróleo Brent baja en torno a un 1,5% y pierde los 44 dólares. El West Texas retrocede un 1% hasta situarse alrededor de los 41 dólares. El crudo cae ante las nuevas preocupaciones sobre la demanda futura ante el estado de semiactividad en todo el planeta provocado en todo el planeta.