Ahorro Corporación ejecutará su quinta reducción de plantilla desde 2012
El número de trabajadores de la firma ronda las 80 personas; la empresa comunicará el diseño del ajuste la próxima semana
El Covid-19 y Mifid 2 se han conjurado contra los brókeres españoles. El último que se verá obligado a relizar un expediente de regulación de empleo (ERE) es la histórica sociedad de valores Ahorro Corporación Financiera, que ya se lo ha comunicado a los trabajadores. El próximo martes les explicará el número exacto de personas que dejarán la firma, que cerró el año pasado con una plantilla media de 82 personas. Fuentes del sector explican a CincoDías que el ERE será importante, al prescindir de más del 20% de su actual fuerza de trabajo. Se espera que el proceso concluya a finales de julio.
El antiguo brazo financiero de las cajas de ahorros fue adquirido en 2017 por StormHarbour y Atitlan, la firma de inversión capitaneada por Roberto Centeno, yerno del presidente de Mercadona, Juan Roig. Esta última es ahora su accionista de control con más del 40%.
La compañía ya efectuó ajustes en 2013, 2015, 2017 y finales de 2018. La causa de esta nueva vuelta de tuerca es la caída de los ingresos, debida principalmente al área de intermediación. Quedan lejos los años imperiales de la firma, con oficinas en lo más granado de la zona empresarial de Madrid, el Paseo de la Castellana, y una plantilla en el entorno de las 400 personas.
Las cuentas del grupo se han ido deteriorando con el paso de los años, a imagen y semejanza de sus colegas del sector. El año pasado, entre agencias y sociedades de valores las ganancias registraron un beneficio neto de 60,69 millones de euros en 2019 (75,5 millones antes de impuestos), con una caída del 38% frente al año anterior. La cifra está a años luz de los casi 900 millones que llegaron a amasar antes de impuestos en el pico bursátil de 2007 con el Ibex a 16.000. Ahorro Corporación fue la tercera sociedad de valores que más perdió el año pasado, con unos números rojos de tres millones de euros. Las otras dos son filiales de bancos extranjeros, con el respaldo de sus matrices, como UBS (11,3 millones) y Credit Suisse Securities (5,6 millones de euros).
Las pérdidas antes de impuestos de Ahorro Corporación fueron de 9,7 millones de euros en 2017 y de 6,1 millones en 2018. Fuentes del sector afirman que, pese a los planes de ajustes puestos en marcha, la pandemia y Mifid 2, que eleva los costes de todo tipo, han impedido que la firma alcanzara el punto de equilibrio en 2019 como estaba previsto.
El segmento de intermediación es donde se centrarán los ajustes, según fuentes conocedoras de la estructura del ERE. Y eso pese a que sus cuotas de mercado son elevadas. Entre enero y marzo, su participación en renta variable alcanzó el 1,4%, según la CNMV, uno de los porcentajes más elevados entre las firmas independientes. Mientras, en deuda pública negociada en AIAF, el mercado regulado de renta fija de BME, acaparó el 27,5% del volumen total.
Los clientes aprietan las tuercas para reducir al mínimo posible los costes de intermediación. Y está en tramitación parlamentaria de la denominada Tasa Tobin, que gravará el 0,2% de la compras de empresas españolas con una capitalización de más de 1.000 millones.
En el primer trimestre, el grupo perdió ante de impuestos unos 500.000 euros, frente a las pérdidas, escuetas, eso sí, de 75.000 euros del mismo periodo del año pasado. Las comisiones se mantuvieron estables en el entorno de los 2,6 billones de euros, pero los gastos de explotación crecieron un 7%, hasta los tres millones.
Las condiciones del ERE que Ahorro Corporación ejecutó a finales de 2018 fueron de 16 salidas, a las que se pudieron sumar cuatro voluntarios, con 26 días por año trabajado y un máximo de 13 mensualidades. El máximo por despedido se situó en 190.000 euros con un mínimo de 20.000 euros.
Los grandes acaparan los beneficios
Los resultados de las sociedades de valores en el primer trimestre del año arrojan unos beneficios de 28,5 millones de euros, si bien, de esta cantidad, tres firmas aportan 29 millones de euros, el saldo neto del resto es negativo. Son la filial de Credit Suisse (18,9 millones), Altura Markets (seis millones), propiedad de BBVA y Société Générale, y la sociedad de Merril Lynch en España (4,1 millones).
Pese al ERE, Ahorro Corporación quiere preservar el área de mayor valor añadido: la de banca de inversión. En su día ficharon a banqueros sénior, como Pedro Flames, procedente de Credit Suisse, y Juan Lladó, antes en Santander. El objetivo era convertirse en una boutique que compitiera con Alantra, JB Capital o Arcano.