El precio negativo del petróleo es más racional de lo que parece
Aunque el colapso épico del lunes puede suponer un exceso, se basa en factores reales
Los precios del petróleo han traspasado el suelo, literalmente. El precio del barril de petróleo crudo West Texas Intermediate (WTI) cotizó en negativo por primera vez en la historia este lunes cuando los operadores entraron en pánico porque los almacenes de oro negro proveniente de los vastos campos de Estados Unidos estaban hasta arriba.
Normalmente, este tipo de colapsos en los futuros sobre el crudo estadounidense a un mes sería un indicio de que algo extraño está sucediendo en el mercado en lugar de algo profundamente perturbador. En este caso, ambas cosas pueden ser ciertas.
La causa inmediata del caos fueron las noticias normalmente inocuas de que el llamado contrato de "primer mes" para mayo vence el martes. Por lo general, los inversores que desean continuar invirtiendo en petróleo simplemente venderían sus contratos de futuro a punto de expirar a los compradores que lo desearan en ese momento, y luego comprarían el contrato de junio, con una diferencia mínima de precio entre los dos. Sin embargo, con el contrato de junio cotizando a 20 dólares por barril, ese diferencial se ha situado en un nivel sin precedentes.
La caída en picado de la demanda y la falta de moderación por parte de los perforadores estadounidenses se traducen en que, al ritmo actual, la capacidad de almacenamiento de Oklahoma estará llena en unas pocas semanas, según dijeron varios operadores a Reuters.
Los compradores tienen tanto miedo a recibir el suministro de crudo en medio de lo que ven como un exceso de petróleo global y una crisis de almacenamiento, que solo lo harán a precios de derribo.
La opinión del optimista, si tal cosa es posible, es que otros precios de referencia del petróleo están menos estrangulados, y que dislocaciones como esta también podrían sugerir que los inversores a corto plazo están teniendo problemas con sus operaciones. El contrato similar para el crudo Brent, que refleja los precios del petróleo en Europa, cayó el lunes solo un 9%, hasta unos 25 dólares por barril.
Los recientes recortes de producción liderados por Arabia Saudí y Rusia en teoría ofrecen una reducción coordinada que sacará 10 millones de barriles de petróleo diarios del mercado en mayo y junio. Sin embargo, estos recortes no comienzan hasta el próximo mes. Es posible que gran parte de los recortes prometidos ni siquiera se materialicen, y la presión sobre los reguladores de Texas para que limiten la producción no ha tenido efectos, lo que sugiere que tampoco hay un alivio regional a la vista.
El problema básico sigue siendo que el impacto del Covid-19 en la demanda diaria mundial de petróleo podría llegar a los 30 millones de barriles. Si es así, el almacenamiento se verá afectado y los precios deberán caer lo suficientemente bajo como para que el mercado se equilibre. Si bien el épico colapso del lunes puede suponer un exceso, está basado en la realidad.