Los bonos ‘verdes’ o cómo financiar la recuperación de la economía y el empleo
Iberdrola, referente global en financiación sostenible, ha sido la primera empresa española en emitir este tipo de deuda en plena crisis de la Covid-19
La pandemia de la Covid-19 marcará sin duda un antes y un después en la economía mundial. Son muchos los foros en los que se habla ya de la necesidad de pensar en los siguientes pasos, en la manera de afrontar esta nueva coyuntura que pondrá a prueba nuestra capacidad de respuesta global.
En este contexto, Iberdrola es una de las primeras empresas que ha lanzado un mensaje de continuidad y de mirar hacia el futuro: la compañía, primera energética española y una de las mayores utilities del mundo por capitalización bursátil, ha anunciado su intención de seguir realizando inversiones para contribuir a la recuperación de la economía y el empleo. De este modo, solo en 2020, prevé invertir 10.000 millones de euros, de los que la mayor parte irán destinados a nuevas instalaciones renovables y a reforzar la digitalización de sus redes.
Con el objetivo de seguir adelante con los nuevos proyectos de energías limpias, Iberdrola se ha convertido en la primera empresa española en emitir bonos verdes en plena crisis del coronavirus. Así, el grupo presidido por Ignacio Galán ha cerrado con gran éxito una emisión de 750 millones de euros, con un vencimiento a algo más de cinco años (en junio de 2025) y un cupón del 0,875%, además de ser la primera en realizarse sin prima de emisión.
En concreto, estos fondos serán destinados a financiar y refinanciar total o parcialmente instalaciones renovables en España, México y Reino Unido, en su mayoría parques eólicos terrestres.
Desde 2014 Iberdrola ha emitido con formato verde casi 11.000 millones de euros
Esta operación ha puesto de manifiesto una vez más la confianza de los inversores en la compañía. Prueba de ello es que la demanda superó los 6.000 millones de euros, en un entorno de gran volatilidad en los mercados financieros. En este sentido, es importante tener en cuenta que los bonos fueron colocados entre más de 200 inversores, principalmente de la Unión Europea y de Reino Unido.
Los bonos verdes, además, suelen generar una mayor demanda, ya que al interés de los inversores habituales se añade el de los inversores socialmente responsables, conocidos como ISR. Al colocar buena parte de la emisión entre este tipo de inversores, Iberdrola continúa diversificando su base inversora y ampliando la demanda, lo que mejora la ejecución de estas operaciones en momentos difíciles de mercado.
Líder en emisiones sostenibles
Iberdrola ha ratificado, una vez más, su compromiso con una estrategia que busca lograr que su pasivo tenga formato verde, de acuerdo con la apuesta de la compañía por un mix energético bajo en emisiones de carbono, liderando la inversión mundial en energías renovables. Hasta la fecha, el grupo Iberdrola ha emitido cerca de 11.000 millones de euros en bonos verdes desde que cerró con éxito su primera colocación en 2014, cuando también fue pionera en España en lanzar esta clase de emisiones.
En plena pandemia, la compañía ha colocado 750 millones de euros a 5 años, con un cupón del 0,875%
Con esta última emisión por valor de 750 millones de euros, en plena pandemia, el grupo Iberdrola ha culminado su octava emisión pública sénior de este tipo, tras la de 2014, las de los meses de abril, septiembre y diciembre de 2016, las de febrero y septiembre de 2017, y la junio de 2018. Iberdrola también ha realizado tres operaciones públicas subordinadas (los comúnmente denominados bonos híbridos) en formato verde, en noviembre de 2017, marzo de 2018 y febrero de 2019. Asimismo, se han realizado colocaciones privadas verdes y también se han emitido bonos verdes desde otras subsidiarias del Grupo, como AVANGRID o Neoenergia.
De hecho, AVANGRID, filial estadounidense de Iberdrola que cotiza en la Bolsa de Nueva York, ha seguido la estela del grupo y cerrado recientemente una colocación de bonos verdes por 750 millones de dólares, apenas una semana después.
Los recursos obtenidos con este tipo de emisiones verdes, tal y como reconoce la agencia certificadora Vigeo, están alineados con los siguientes Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas, que Iberdrola ha incorporado a su estrategia: el número 7 –Energía Asequible y no contaminante– y el número 13 –Acción por el Clima–.
Además, Iberdrola firmó en 2017 el primer préstamo verde realizado en el mundo para una compañía energética, por valor de 500 millones de euros, y a comienzos de 2018 y con un sindicato de bancos, también el primer préstamo verde de Latinoamérica desde su filial Iberdrola México.