Enresa comprará contenedores para los residuos de tres nucleares por 212 millones

Autorizada la compra de para Almaraz, Trillo y Garoña, sin que se haya tomado una decisión sobre el almacenamiento

El Consejo de Ministros autorizó ayer a la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos (Enresa) la celebración de dos contratos para fabricar y suministro contenedores para el almacenamiento en seco del combustible gastado de las centrales nucleares de Almaraz (Cáceres), Trillo (Guadalajara) y Santa María de Garoña (Burgos). Estos dos contratos, por importe de 212,7 millones de euros, se adjudicarán a la empresa española Equipos Nucleares (ENSA).

La decisión ha sorprendido teniendo en cuenta que el borrador del Plan General de Residuos Radiactivos aprobado la semana pasada por el Gobierno no incluye una decisión final sobre si el almacenamiento de los residuos del parque nuclear español se hará de manera centralizada (ATC) o descentralizada (ATD) para varias plantas. Los contenedores contratados son de doble uso (servirían para una opción o para otra), pero son más caros, según los expertos.

Los contenedores servirán para custodiar el combustible gastado cuando las piscinas de las centrales estén saturadas.

El primero de los contratos, por valor de 85,1 millones de euros, tiene por objeto suministrar 24 contenedores a las centrales de Almaraz (14) y Trillo (10). El plazo de ejecución es de cinco años, iniciándose la entrega en 2022. Los contenedores son del mismo tipo que los 10 que fueron adquiridos por Enresa en 2015 y que han sido autorizados por el Ministerio, previo informe del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN).

El segundo contrato, con un coste de 127,6 milltiene como fin dotar de 44 contenedores a la central de Garoña,también el plazo de cinco años (las primeras unidades, en 2023). Los contenedores son del mismo tipo que los cinco que fueron adquiridos por Enresa en 2012 y también autorizados por el CSN.

Los contenedores serán sufragados por el fondo para la financiación del Plan General de Residuos Radiactivos, que aportan a través de una tasa las empresas titulares de las centrales nucleares, que en enero se incrementó casi un 20%. Este fondo, según el nuevo plan general, ascenderá a 23.000 millones hasta 2100, contando el acumulado desde 1985.