La geolocalización de móviles medirá cómo se cumple el estado de alarma
Entre los objetivos está evaluar las restricciones de movimientos Vodafone incluye este ofrecimiento en su plan contra la enfermedad
Las operadoras van a ofrecer al Gobierno herramientas de big data para facilitar datos de geolocalización anónimos y agregados de usuarios para analizar si los ciudadanos están cumpliendo con las restricciones de movimientos impuestas en la declaración de estado de alarma para tratar de limitar los contagios del coronavirus Covid-19. Según fuentes del sector, las telecos tienen en marcha proyectos de estas características para presentárselos al Gobierno, y analizar la vía para su uso.
Uno de los puntos del plan de Vodafone para hacer frente al Covid-19 es aportar información al Gobierno sobre los movimientos de la población en las áreas afectadas. La teleco, que ya usa este tipo de técnicas en países africanos, va a ofrecer estas herramientas a los gobiernos de los países donde opera, entre ellos España.
La teleco indica que cada vez es más importante que las autoridades controlen los movimientos de las personas que están en cuarentena, y añade que siempre que sea técnicamente viable y la legislación lo permita, Vodafone se ofrece a ayudar a las autoridades proporcionando información basada en grandes bloques de datos anonimizados. “Estamos elaborando un mapa de calor agregado y anónimo de Lombardía que ayude a las autoridades a conocer mejor los movimientos de la población para frenar al Covid-19”, dice.
Respuesta única
Vodafone explica que está preparada para trabajar con todos sus socios y garantizar una respuesta única en estas áreas. “Debido a las presiones que van a soportar las operadoras en los próximos meses y teniendo en cuenta que nuestro foco debe estar en mantener las infraestructuras críticas en los países en los que operamos, apreciaremos la ayuda de los gobiernos para garantizar que nuestras medidas pueden implementarse de la manera más eficaz posible para el interés del público”.
Desde Telefónica se indica que la teleco ha puesto a disposición de las Administraciones Públicas y las Instituciones sanitarias sus servicios y capacidades para ayudar a contribuir a los esfuerzos para contener el brote. “Capacidades de big data y de gestión de datos anonimizados y agregados de nuestra red, datos de movilidad, centros de procesamiento de datos en la nube, así como capacidades de atención telefónica o digital”, indican desde la operadora, precisando que todavía se ha concretado ningún proyecto.”
A su vez, Orange ha ofrecido sus servicios de big data e inteligencia artificial, para relacionar los movimientos de la población con la propagación del virus. “Estamos trabajando con los servicios de emergencia para conocer los movimientos de los ciudadanos y tomar las medidas oportunas en base a los datos agregados”, dicen desde la teleco.
El uso de estas técnicas siempre genera polémicas por la privacidad. Fuentes del sector insisten en que los datos serán siempre anónimos y agregados, respetando las normas de protección de datos.
En octubre, el INE llegó a un acuerdo con las operadoras para recabar datos anónimos desde móviles de usuarios para incorporarlos a la información sobre movilidad en los Censos de Población y Viviendas. El INE dejó claro que las telecos no facilitarían datos sobre números de teléfono, ni titulares de las líneas.
Uso de estas técnicas en otros países
Estas técnicas ya se usan en otros países. Según Reuters, Telecom Italia, Vodafone Italy, Wind Tre, Telekom Austria y Deutsche Telekom han entregado datos anónimos a las autoridades para ver esos movimientos. Vodafone dijo a Reuters que suministró datos agregados y un mapa de zonas de calor de la región de Lombardía, la más golpeada en Italia por el coronavirus. Los datos mostraron caídas de un 60% en los movimientos de las personas de más de 500 metros.
A su vez, Telekom Austria, por ejemplo, ha adaptado para la lucha contra el Covid-19 una aplicación de análisis de movimientos desarrollado por la empresa de software Invenium para predecir los atascos en el tráfico y el número de visitantes a atracciones turísticas.