Deloitte alerta de la dependencia que tiene Galletas Siro de Mercadona
La banca condiciona la nueva financiación a que mantenga su contrato con la cadena de supermercados
Galletas Siro ha registrado sus cuentas de 2018 en las que el auditor Deloitte ha alertado de que la compañía palentina depende demasiado de la cadena de supermercados Mercadona, a la que destinó el 88% de sus ventas en 2018, tres puntos más que durante 2017. El grupo obtuvo un beneficio 9,1 millones de euros durante ese año, un 40,1% menos que el ejercicio precedente.
En los resultados de la empresa se observa que el grupo Siro pidió un préstamo de 240 millones en junio del año pasado al banco Santander y a Rabobank. Entre las condiciones para acceder a la financiación y que no se produzca el vencimiento de la misma, se especifica que el grupo debe mantener su relación con Mercadona.
“Se producirá el vencimiento anticipado del préstamo en el caso de que se produzca la finalización total del acuerdo de suministro que actualmente vincula al grupo Siro con Mercadona o cuando sea anunciado o notorio un desenganche progresivo de alguno de los contratos con dicho cliente que suponga una reducción de las ventas del grupo Siro por debajo de los 65 millones de euros en alguno de los años de vigencia del contrato de préstamo”, ha señalado el auditor.
Por otro lado, la compañía decidió poner a la venta en noviembre de 2018 sus líneas de negocio dedicadas a la fabricación y comercialización de productos de bollería y de pan de molde, tras anunciar una fusión con la multinacional Cerealto, para crear el grupo Cerealto Siro Foods, que se centra en la fabricación de galletas, cereales y pastas.
Por ello, Siro vendió sus fábricas de Briviesca (Burgos), El Espinar (Segovia), Navarrés (Valencia) y Medina del Campo (Valladolid), así como las de pan en Antequera (Málaga) y Paterna (Valencia). Las de Briviesca y Antequera eran propiedad de Cerealto, después de que se las comprara hace un año al mismo Grupo Siro.
Su negocio principal durante el año pasado siguieron siendo las galletas, que supusieron el 48% de los ingresos de la compañía palentina, que alcanzaron un total de 241,9 millones, un 7,9% menos que en el ejercicio precedente. Esto supone una gran bajada del peso de esta rama en las actividades del grupo, ya que en 2017, las galletas representaron el 61% del valor de las ventas.
La pasta alimentaria supuso el 28% del negocio, ocho puntos más que en el ejercicio precedente, y los cereales de desayuno representaron el 23% (un incremento de cinco puntos). La compañía continuó centrándose claramente en el mercado nacional, donde se produjeron el 98% de sus ventas (idéntico porcentaje al del ejercicio anterior).