Rioja venderá este año la nueva generación de vinos singulares y espumosos
La denominación actualiza su etiquetado sobre el origen de los caldos
Los responsables de La Denominación de Origen Calificada Rioja (DOCa Rioja) prevén que durante este año saldrán al mercado la nueva generación de caldos espumosos y de los etiquetados como "Viñedo Singular". Rioja ha actualizado la información que incluyen las botellas para aclarar el origen de los vinos, con nuevas indicaciones geográficas en las que han participado 75 marcas de la denominación.
Fernando Salamero, presidente de DOCa Rioja, ha manifestado en Bilbao que los cambios en el etiquetado refuerzan la marca de la denominación. La información requiere de un esfuerzo de las bodegas para garantizar la trazabilidad del producto, desde la identificación de la zona de donde procede la uva hasta su posterior almacenamiento en barrica y embotellado final.
Son tres las informaciones adicionales que incorporarán las etiquetas de los caldos de Rioja. Una identificará el producto como "Viñedo Singular". Para conseguir esta calificación, las cepas deberán tener hasta 35 años de antigüedad. DOCa Rioja permitirá una producción máxima de 5.000 kilos por hectárea para uvas tintas y de 6.922 kilos en el caso de uvas blancas. El proceso, que incluye la transformación al 65 % de la materia prima en la propia bodega, deberá contar con la ratificación adicional del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Otra calificación que se incorpora al etiquetado es la de "Vino del Municipio". El caldo deberá haber sido elaborado al 85 % con uva procedente de una localidad en cuestión, cuyo nombre será el que conste en la presentación de la botella al consumidor.
Por último, el "Vino de Zona" solo podrá incorporar un 15 % % de uva de localidades limítrofes, en similar consideración a la establecida para el "Vino de Municipio".
Para los caldos espumosos, la DOCa Rioja exige una permanencia mínima en barrica de 15 meses, que sube a los 24 meses en la categoría "Reserva" y a los 36 meses para la denominación "Gran Añada".
Pablo Franco, director del órgano de control de la Denominación de Origen Rioja, ha comentado en Bilbao que 84 bodegas participan ya en los citados procesos de acreditación, que luego deben conseguir la ratificación de 150 de los 200 miembros que integran un comité de cata, cuya decisión es vinculante.
La zona vitivinícola de Rioja incluye a 600 bodegas, con la suma de empresas que se dedican en exclusiva al cultivo de cepas y a las que no comercializan sus caldos en el mercado. Esta denominación de origen mueve un negocio anual de 1.500 millones, el 37 % de los cuales se obtienen en los mercados exteriores, principalmente Reino Unido, Alemania, Estados Unidos y Suiza, en ese orden.
Las novedades en el etiquetado han sido presentadas esta tarde en Bilbao a más de 300 profesionales del sector del vino.