La mujer en el ecosistema emprendedor
Se ha de asegurar la presencia femenina en los foros sobre el tema para que muestren la labor que realizan
Todos somos emprendedores en algún aspecto, pero calificamos así a aquellos que planifican objetivos, aceptan riesgos y ejecutan su idea. Todos somos emprendedores en algún momento, pero consideramos así a los que acaban dando forma a una empresa que responde a una visión, misión y valores. Existe una cierta “moda” en torno al emprendimiento. Continuamente vemos casos de éxito, pero solo el 10% de los nuevos emprendimientos lo obtienen, según el World Economic Forum. Es una opción de alto riesgo que requiere de muchas competencias. Tradicionalmente lo han protagonizado los hombres, pero cada vez más mujeres se reivindican como emprendedoras exitosas.
Múltiples razones llevan a la mujer a emprender y reducir así la brecha entre mujeres y hombres emprendedores, que en España se ha estrechado un 36% en diez años, según el Global Entrepreneurship Monitor sobre Emprendimiento Femenino, que constata que la actividad emprendedora de las mujeres ha aumentado un 10% en el mundo en el periodo 2016-17, mientras que la diferencia por sexos se ha contraído un 5%. En España, la brecha ha bajado un 6,5% en ese período, siguiendo la tendencia de la década.
Los motivos que impulsan a las mujeres a emprender son variados: necesidad, moda, aprovechar una oportunidad de mercado o materializar una idea. Según el informe anterior, la tasa de españolas que han decidido emprender por necesidad se ha mantenido estable en los dos últimos años (25,1%), por lo que más del 70% están iniciando proyectos empresariales movidas por las oportunidades del mercado. En relación a la forma de emprender, el 10% de las encuestadas dirigen pequeños negocios unipersonales y no tienen intención de contratar empleados en el futuro. Aparte, el 13,4% de las mujeres emprendedoras tienen intención de contratar a seis o más personas. Este porcentaje de expectativas es superior a los de Francia y Alemania, pero no alcanza la media europea (28,3%) ni la de EE UU (37,4%).
Aunque la presencia de mujeres emprendedoras cada día es mayor, es cierto que por tradición cultural y, seguramente, por características competenciales, generalmente son más prudentes y perfeccionistas, por lo que invierten más tiempo que los hombres en el análisis de riesgos previo a la decisión de emprender. Factores como una mayor presencia de la mujer en la vida política y económica y una mayor visualización de sus logros emprendedores están asociados positivamente con el emprendimiento femenino.
Todos conocemos casos de emprendimiento de éxito protagonizado por mujeres, pero todavía subsiste una brecha de género. Se ha de asegurar una presencia femenina en los foros emprendedores que facilite a las mujeres emprendedoras mostrar la importante labor que realizan.
Carmen Ruiz-Viñals es profesora del Departamento de Empresa y Economía de la Universitat Abat Oliba CEU. Cátedra de Empresa Familiar y de Creación de Empresas UAO CEU