China aprueba una nueva ley de inversión extranjera en un claro gesto hacia EE UU
El texto incluye cambios sobre la protección de la propiedad intelectual de empresas foráneas
La Asamblea Nacional Popular (ANP), el Legislativo de China, aprobó hoy la nueva ley unificada de inversión extranjera, el proyecto estrella de la sesión anual del organismo, que se cierra hoy en Pekín.
El proyecto original data de 2015, pero las autoridades chinas aceleraron su tramitación a finales de 2018 debido, según expertos, a que Pekín considera que esta nueva regulación puede satisfacer demandas presentadas por Estados Unidos en el marco de las negociaciones para resolver la disputa comercial entre ambos países.
Durante la última jornada de la ANP, que comenzó el pasado día 5, 2.929 diputados votaron a favor de la aprobación, mientras que 8 se opusieron y otros 8 se abstuvieron, según la agencia estatal de noticias Xinhua, que destacó la "aplastante mayoría" que respaldó la decisión. Esta nueva ley sustituirá a las tres que regulan actualmente la materia.
El presidente de la ANP, Li Zhanshu, pronunció un discurso para clausurar la sesión en el que la calificó de "ley fundamental" para "promover el aperturismo de alto nivel en esta nueva era". "Debemos estudiar concienzudamente esta ley y ponerla en marcha para facilitar la inversión", agregó. Según Xinhua, la decisión de aprobarla "demuestra la determinación del país (China) de buscar una nueva etapa de apertura de alto nivel".
El despacho del medio oficial apuntó: "Con provisiones unificadas para la entrada, la promoción, la protección y la gestión de la inversión extranjera, es una nueva y fundamental ley para la inversión extranjera en China".
"Su objetivo es mejorar la transparencia de las políticas sobre inversión extranjera y garantizar que las empresas nacionales y foráneas estén sujetas a una serie de reglas unificadas y que compitan en igualdad de condiciones", agregó.
La ley tuvo dos borradores, pero la agencia informativa no precisó si el texto aprobado es resultado de modificaciones al segundo de ellos. Una de las grandes novedades es precisamente la mención al "tratamiento nacional a las inversiones extranjeras", según el texto del segundo borrador, presentado a finales de enero.
No obstante, la Cámara de Comercio Estadounidense en China se mostró escéptica ante el proyecto al considerar que era "todavía bastante genérico" y que no entraba en detalles específicos, una queja compartida por la Cámara de Comercio de la Unión Europea (UE) en China.
Tras revisar el segundo borrador, la Cámara europea consideró que estaba escrito con "términos amplios y lenguaje vago", por lo que reclamó una "clarificación" que evite que "haya espacio para la aplicación arbitraria de la ley".
En una rueda de prensa posterior, el primer ministro chino, Li Keqiang, aseguró que "en los próximos meses" se pondrán en marcha "regulaciones para proteger los derechos de los inversores extranjeros" como un "mecanismo de información y transparencia".
Asimismo, al respecto de la protección de la propiedad intelectual -una de las principales demandas de Estados Unidos-, Li agregó que las autoridades harán "revisiones sobre la protección de la propiedad intelectual" e introducirán "un mecanismo de compensación para las infracciones" en esta materia.
"Esperamos también que los Gobiernos extranjeros tengan una visión objetiva sobre la inversión de las compañías chinas y sus socios extranjeros", indicó el mandatario, quien se refirió al establecimiento de la igualdad entre compañías locales y foráneas como una situación de "competencia neutral".
Durante la última jornada de la ANP también se aprobaron otros documentos, como los informes de trabajo del Tribunal Supremo o los presupuestos estatales y locales.