Los bancos sufren por el BCE pero el Ibex resiste y supera los 9.150 puntos
El interés del bono español a 10 años marca mínimos desde julio
El inicio de la temporada de resultados y la reunión de política monetaria han acaparado la atención del mercado. Después de que ayer el Ibex consiguiera desmarcarse de las caídas en Europa, hoy las compras han acompañado al selectivo, aunque han sido de menor importancia.
Las subidas del 0,8% registradas a media sesión han permitido al selectivo tocar los 9.200 puntos, pero al cierre, tras la intervención de Draghi que ha enfriado eventuales subidas de tipos en 2019, las alzas se han difuminado hasta el 0,23%, que dejan el Ibex en los 9.150 puntos. Por su parte, el euro cae un 0,3%, hasta los 1,13 dólares por la misma razón.
La reacción de los inversores pone en precio las palabras del jefe de la política monetaria de la eurozona que ha reconocido un incremento motivado en gran medida por las tensiones comerciales. Draghi ha reconocido que es necesario continuar con los estímulos monetarios pues las perspectivas de crecimiento de la zona euro se mueven a la baja.
Si ayer fue la banca el catalizador de las subidas de la Bolsa española, hoy han jugado el papel contrario. Las entidades con mayor exposición al mercado doméstico y por tanto más sensibles a las subida de tipos son las que peor comportamiento han registrado, salvo Bankinter, que ha avanzado un 1,37%.
El mercado esperaba además que el BCE anunciara subastas de liquidez para afrontar los vencimientos de las anteriores. Y no ha sido así. Sabadell ha cedido un 1,99%; CaixaBank, un 1,84%; Bankia, un 1,44%; Santander, un 0,45%; y BBVA, un 0,42%. Mediaset se ha disparado un 5,81% por el anuncio de una recompra de acciones por casi 200 millones, seguido de Cie, con un 2,72% y Repsol, con un 1,86%.
En Europa, los movimientos oscilaron entre el alza del 0,53% del Dax alemán y la caída del 0,35% del FTSE británico. El mercado de deuda tampoco permanece ajeno a la intervención del BCE. Las perspectivas de menores crecimientos –el índice de pedidos industriales PMI elaborado por Markit ha marcado en el mes de enero 49,9 puntos en Alemania, lo que indica contracción– dejan la puerta abierta a un retraso de la subida de tipos. El consenso de los analistas espera que sea ya en 2020 cuando la institución proceda a realizar la primera subida de tipos. Esto ha llevado a los inversores a buscar refugio en la renta fija y la deuda alemana ha sacado el mayor partido.
La rentabilidad del bund retoma la senda bajista y retrocede al 0,18% desde el 0,22% que registraba ayer. Pero los descensos no son exclusivos de la deuda alemana, también los rendimiento de la deuda española con vencimiento en 2029 marca mínimos desde julio al caer al 1,224% desde el 1,32% que marcaba en la sesión previa.
Este jueves, al otro lado del Atlántico, la Cámara de Representantes de EE UU vota una propuesta demócrata para reabrir el Gobierno. Ayer un asesor presidencial apuntó que de extenderse al cierre del Gobierno federal hasta marzo el crecimiento en el trimestre sería nulo. Mientras, el precio del petróleo se mantiene estable en el entorno de los 61 dólares por barril Brent.