Tesla Model Y: se filtran sus planes de producción
Nuevos datos sobre las cifras de producción que maneja la compañía sobre el SUV compacto
La firma de Elon Musk ha pasado momentos difíciles con el Model 3, y no precisamente porque no esté cosechando un rotundo éxito, sino por aquello que conocemos como morir de éxito. La enorme demanda del vehículo y los problemas de Tesla para ofrecer una producción acorde, han generado mucha expectación respecto de los planes futuros de la compañía a la hora de fabricar sus nuevos modelos. Ahora hemos conocido gracias a Business Insider nuevas informaciones acerca del Tesla Model Y, el SUV que se fabricará sobre la base del Model 3, y que podría focalizar la mayoría de ventas de la marca en los próximos años. Vamos a conocer qué es lo que dicen estos datos.
7.000 Model Y a la semana
Según los documentos filtrados, que habrían sido entregados a accionistas antes de la presentación de los últimos resultados de ventas, Tesla planearía la fabricación de 7.000 unidades del Model Y para el 20 de diciembre de 2020. Incluso esta producción se vería complementada por otras 5.000 unidades para febrero de 2021 con la ayuda de la Gigafactoría que abrirá en China la marca. Otro de los aspectos que se confirman en esta documentación es que el Tesla Model Y se basará en la plataforma del Tesla Model 3, por lo que será un vehículo de dimensiones similares.
Recordemos que en su momento Tesla marcó en 5.000 unidades semanales la producción del Tesla Model 3 para finales del pasado año, algo que le ha costado sudor y lágrimas a la empresa, tras haber alcanzado el objetivo finalmente durante el pasado mes de julio. Sobre el Model Y, se espera que su presentación se produzca durante la primavera de 2019, y que el comienzo de la producción se haga realdad a finales de 2020. La nueva Gigafactoría de la marca en China podría finalmente montar los que están llamados a ser los dos modelos más populares y de referencia de la forma.
Estos serán tanto el Model 3 como el Model Y, el primero por todo lo que ya sabemos de él, y el segundo, porque será un Model 3 enfrascado en la piel de un SUV de tamaño compacto, una fórmula ganadora que sólo una nueva mala gestión de la producción podrá arruinar.