El Gobierno defenderá ante la UE que la industria cementera reciba ayudas por sus emisiones indirectas de CO2
Industria y las empresas proponen construir carreteras de hormigón para incentivar la demanda El Ejecutivo incluirá al sector en el listado de empresas que reciben ayudas por ser electrointensivas
La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha presentado este lunes junto al vicepresidente de la patronal Oficemen, Isidoro Miranda, la agenda sectorial de la industria del cemento. En la presentación, Maroto ha asegurado que el Gobierno reclamará ante la UE que el sector cementero sea incluido en el listado de empresas que reciben ayudas compensatorias por sus emisiones indirectas de CO2. “Se trata de una histórica reivindicación del sector”, ha dicho la ministra.
El Gobierno planea que las cementeras recuperen en 2022 su nivel de actividad previo a la crisis, con un total de 30 millones de toneladas de producción equivalente. Este plan, según el Ejecutivo, permitiría crear 2.000 puestos de trabajo directos y otros 4.000 indirectos.
Entre las medidas presentadas (un total de 10) está construir carreteras con hormigón, para incentivar el consumo. Además, Oficemen destacó que esta medida ayudaría a ahorrar al Estado 43 millones de euros anuales en mantenimiento de carreteras; a reducir en 82.000 toneladas las emisiones de CO2 a la atmósfera; y a ahorrar 39 millones de euros en combustible al año a los usuarios. El plan contempla también la inclusión del sector del cemento en el listado de empresas que reciben ayudas por ser compañías electrointensivas.
El Gobierno quiere evitar con estas medidas, que surjan nuevos casos como el de Cemex, la compañía mexicana que cerrará dos plantas de cemento en España (en Almería y Baleares). “Mientras buscamos una solución para estas dos plantas abordamos medidas para el conjunto del sector que permitan mantenerI su competitividad y evitar nuevos cierres”, ha dicho Reyes Maroto. La ministra ha resaltado que esta serie de ayudas se enmarcan en el objetivo de conseguir que la industria represente el 20% del PIB español.
Oficemen había informado en octubre de que preveía una reducción del crecimiento del sector para 2018, pasando del 12% al 7%. Uno de los principales motivos señalados por los fabricantes fue la “paralización de la ejecución de la obra pública”. “Las comunidades autónomas no están ejecutando las construcciones que se licitan”, dijo Jesús Ortiz, presidente de Oficemen. “Antes, las obras tenían un desfase máximo de un año entre su licitación y su ejecución. Hoy, hay edificaciones que pasan cinco años y no empiezan”, añadió.