OHL se derrumba en Bolsa en plena caída de la construcción, presionada por la CNMC y el pacto fiscal
El grupo de la familia Villar Mir ha caído más de un 13% en un nuevo viernes negro Competencia investiga el posible reparto de obras y el acuerdo presupuestario eleva la presión impositiva
El de la construcción destaca en la jornada de hoy, junto al sector de la energía, por el castigo generalizado en Bolsa. Y es OHL la que sufre de forma excepcional, con un desplome que supera el 13%. ACS y Ferrovial oscilan entre el 1,6% y el 1,4% de pérdida; Acciona se deja un 3,97% y Sacyr cae un 3,34%. FCC es la menos perjudicada y cede un 0,49%.
Este mal comportamiento en Bolsa tiene lugar una vez conocidos los detalles del pacto presupuestario firmado ayer por el Gobierno de Pedro Sánchez y el grupo opositor Podemos. Al margen de consagrar un alza del 22% en el salario mínimo interprofesional, hasta los 900 euros mensuales, el acuerdo establece un tipo mínimo de Sociedades del 15% para grandes empresas, lo que resta el efecto de las habituales deducciones, y la obligatoriedad de tributar por el 5% de los dividendos percibidos por las filiales extranjeras. Es en este último punto donde las constructoras, con gran parte del negocio fuera de España, podrían sentir una carga extra.
Enésimo golpe para OHL
Para el conglomerado de la familia Villar Mir llueve sobre mojado: tuvieron muy mala acogida en el mercado los resultados del primer semestre, con pérdidas multimillonarias tras la venta de OHL Concesiones, y tampoco ha tenido buena lectura la última desinversión en el complejo hotelero mexicano Mayacobá. A estas circunstancias se suma el renovado ataque de los bajistas, entre los que Marshall Wace y PDT se han reforzado en los dos últimos días hasta alcanzar el 1,8% y 0,7%, respectivamente.
Al margen de la situación particular de OHL, esta y el resto de constructoras cotizadas fueron señaladas ayer por la CNMC con la apertura de un expediente sancionador una vez que el órgano de la Competencia ha detectado "indicios racionales" de que las grandes de la obra pública constituyeron un cártel para intercambiar información y restringir la competencia en la licitación de obras de infraestructuras públicas. Además de Acciona, ACS, FCC, Ferrovial, OHL y Sacyr, la investigación también señala a Isolux Corsán, actualmente en liquidación pero que llegó a ser el séptimo grupo constructor del país.