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Juncker: “Si es necesario propondré cambios en los Presupuestos de Italia”

"Analizaremos los Presupuestos italianos sin ira con cariño", afirma el presidente de la CE. Di Maio: "no tenemos ninguna voluntad de dar marcha atrás" en unos Presupuestos expansivos.

 El presidente de la Comisión Europea en la principal sinagoga de Viena (Austria).
El presidente de la Comisión Europea en la principal sinagoga de Viena (Austria).CHRISTIAN BRUNA (EFE)

El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ha afirmado este sábado que el organismo no interferirá en la planificación de los Presupuestos por parte del Gobierno de Italia, si bien ha dicho que propondrá cambios "en caso de ser necesario".

"Está en manos de los responsables políticos italianos encontrar las normas y medidas que permitirán a Italia permanecer dentro de los objetivos presupuestarios acordados", ha manifestado en una entrevista a tres diarios austriacos.

"Analizaremos los Presupuestos italianos sin ira con cariño y propondremos cambios en caso de ser necesario", ha subrayado al Der Standard, Kurier y Der Falter.

Las palabras del presidente de la Comisión Europea han llegado un día después de que el viceprimer ministro italiano Matteo Salvini acusara a Juncker y al comisario europeo de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, de haber 'arruinado' tanto a Europa como a Italia.

Ante las críticas recibidas desde Bruselas en la última por los presupuestos previstos para el próximo año y las previsiones de déficit, Salvini denunció que en los últimos años Europa sí ha visto con buenos ojos otros presupuestos que 'han empobrecido y precarizado a Italia'.

"Así que no me levanto por la mañana pensando el juicio que hacen del Gobierno de Italia personas como Juncker y Moscovici, que han arruinado a Europa y a Italia", aseguró. "Que digan lo que quieran, nosotros seguimos adelantes en pie y serenos", añadió.

El vicepresidente del Gobierno, Luigi Di Maio.
El vicepresidente del Gobierno, Luigi Di Maio.MAURIZIO BRAMBATTI (EFE)

Salvini se ha mostrado muy molesto con la advertencia que hizo Juncker la semana pasada, diciendo que Italia podría terminar como Grecia y ha dado a entender que el presidente de la Comisión Europea tiene problemas con el alcohol, remitiendo a un vídeo de una cumbre europea en el que se veía que no podía mantenrse en pie y caminar adecuadamente. Juncker explicó entonces que tenía una fuerte ciática.

El propio Juncker advirtió el lunes a Italia en contra de seguir adelante con los Presupuestos propuestos para 2019, que el bloque ha criticado por ser excesivamente laxos. 'Italia se distancia de los objetivos presupuestarios que hemos acordado conjuntamente a nivel de la UE".

Respuesta italiana

El ministro de Desarrollo Económico italiano, Luigi Di Maio, avanzó hoy que el Gobierno "no tiene ninguna voluntad de dar marcha atrás" en sus Presupuestos expansivos, ante los que la Comisión Europea (CE) ha expresado su "seria preocupación".

El Ejecutivo del Movimiento Cinco Estrellas y la ultraderechista Liga ha presentado unas cuentas para el próximo trienio que prevén un aumento del déficit y del gasto público para financiar e incluir en los Presupuestos algunas de las medidas prometidas en campaña.

En concreto sus previsiones indican que el déficit este año será del 1,8 % del Producto Interior Bruto, mientras que aumentará hasta el 2,4 % en 2019, el 2,1 % en 2020 y volverá al 1,8 % en 2021.

El comisario europeo para Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, y el vicepresidente de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, enviaron en la noche del viernes una carta al Gobierno para expresar su "seria preocupación" por "la desviación significativa de la línea recomendada" en materia presupuestaria, según informan los medios.

Además, pidieron a Roma que se asegurase de que el borrador de los Presupuestos, que deberán examinar en Bruselas, "está en línea con las reglas comunes", y concluyeron la misiva declarándose abiertos a "un diálogo constructivo".

Di Maio, que agradeció que esta advertencia llegara a mercado cerrado, sostuvo que ya se esperaban que estas cuentas "no gustaran en Bruselas" y vaticinó que "ahora comienza una fase de discusión con la Comisión Europea", en unas declaraciones a los medios en Roma.

Aunque subrayó que "no habrá marcha atrás" y que ni siquiera han preparado un "Plan B".

"Estas cuentas no son para desafiar a Bruselas sino que deben recompensar al pueblo italiano que tantas estrecheces ha sufrido", señaló el también vicepresidente del Gobierno.

Di Maio apuntó que en los próximos días el ministro de Economía, Giovanni Tria, dará inicio a la negociación con Europa y que el presidente de la Cámara de los Diputados, Roberto Fico, acudirá a Bruselas para ejercer de mediador.

"Estaremos todos unidos y desempeñaremos un juego de equipo para explicar a la CE que los italianos necesitan estas medidas, que no son propagandísticas sino que cambiarán finalmente la vida de las personas", auguró.

En una entrevista para el informativo del canal público RAI, el ministro Tria se declaró "optimista" sobre las negociaciones y señaló que explicará "por qué hemos considerado necesario apartarnos del camino que había sido anteriormente concordado" por el anterior Gobierno de centroizquierda en vigor hasta junio.

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