Digitalización en pymes: buena para tu negocio. ¿Buena para tus clientes?
CEOE asegura que es “imprescindible” para una buena gestión de la empresa
Las pequeñas y medianas empresas son conscientes de la importancia de la digitalización. Pero dudan de los beneficios que este proceso interno pueda reportar a sus clientes. Así lo pone de manifiesto el informe elaborado por Sage, 'Radiografía de la Pyme 2018'. El 48 % de los entrevistados asegura que la digitalización es imprescindible para la buena gestión, mientras que el 42 % lo cree necesasrio para disponer de información en tiempo real. Ese mismo porcentaje también le da valor por el ahorro de costes que puede generar.
Sin embargo, solo el 18 % cree que la digitalización puede ayudar a mejorar la relación con los clientes, y sólo el 14 % considera que gracias a ella pueden llegar a captarse nuevos clientes.
El informe ha sido presentado por el presidente de la Comisión de Sociedad Digital de la CEOE, Julio Linares, que considera que la clave del éxito está en adaptarse a los cambios. Linares ha presentado en la sede de la CEOE el mencionado informe, que también refleja que solo al 3% de las pymes les preocupa la digitalización, ya que por delante se encuentran otras preocupaciones como la demanda, la captación de clientes, la evolución del mercado o la morosidad.
Un 76% invierte en digitalización
En los últimos dos años un 76 % de las pymes han invertido en digitalización, aunque la media de dinero invertido se sitúa en los 10.000 euros. En cuanto a los planes de digitalización, solo el 19 % ha asegurado tener un plan sobre ello para su negocio, y de éstas, el 53 % tiene ya un presupuesto para ello.
Recomiendan a las pymes la creación de una cultura de la innovación o el impulso de una visión digital. Además, se han hecho una serie de propuestas al Gobierno en este sentido, tales como como la lucha contra la economía sumergida y la aplicación del Sistema Inmediato de Información (SII) a todas las empresas, lograr que el I+D+i en España alcance la media europea, invertir en la transformación digital de más sectores, reformar el sistema educativo, y ayudar al “reciclaje” de las personas de más de 40 años.