El petróleo escala un 5,8% desde el pacto de la OPEP para elevar su producción
Arabia Saudí y Emiratos Árabes, a favor de aumentar la producción Iran amenaza con bloquear una importante ruta comercial de crudo
La decisión de los países integrantes de la OPEP, más otros como Rusia, de elevar su capacidad de producción y poner fin a año y medio de recortes ha llevado al Brent a situarse por encima de los 79 dólares. Desde el 21 de junio, un día antes de que se iniciara la reunión del cártel, el petróleo de referencia en Europa escala un 5,85%. Los miembros de la OPEP acordaron entonces elevar su capacidad de bombeo en hasta un millón de barriles al día a partir de julio, cuantía que se vería reducida hasta los 600.000 barriles diarios de forma efectiva.
El presidente de EE UU, Donald Trump, ha tratado de frenar esta subida solicitando a Arabia Saudí que elevara su capacidad de bombeo de crudo en dos millones de barriles diarios en un esfuerzo para estabilizar el precio tras el retorno del embargo económico a Irán y los problemas de bombeo en Venezuela y Libia.
En respuesta a Trump, los mayores países productores de petróleo han asegurado que están preparados para incrementar su capacidad de extracción. Arabia Saudí afirmó ayer que hará lo que sea necesario para frente a "cambios futuros en la oferta y demanda" del crudo en línea con el resto de países productores, un mensaje que replicó también Emiratos Árabes Unidos.
Como réplica, Irán amenazó ayer con bloquear el estrecho de Ormuz, una de las mayores rutas comerciales para las exportaciones de petróleo de sus vecinos si Estados Unidos cumple y vuelve a imponer su bloqueo comercial. Un veto que implicaría sanciones para todos los países que importen petróleo de Teherán.
"Si sigue habiendo una oferta insuficiente para toda la demanda global, es normal que el barril siga subiendo", reconoce José María Luna, director de análisis de Profim. Una escalada que se está produciendo en un momento de apreciación del dólar, y que está estaría impidiendo el objetivo último del acuerdo de la OPEP: elevar la producción para evitar que el crudo continúe su escalada.
Luna reconoce que una apreciación mayor del petróleo –que el Texas alcanzara los 85 dólares– implicaría una ralentización de la economía global y que generaría tensiones inflacionistas.
El mercado estaría además poniendo en precio la posibilidad de que el pacto del cártel salte por los aires y la OPEP pierda su papel de preeminencia y los países productores opten por acuerdos paralelos.