El principio de acuerdo para mantener NAFTA está cerca
Esta semana se producirán diversos anuncios importantes en materia comercial. EEUU debe decidir el martes, 1 de mayo, si prorroga la exención concedida a los países miembros de la UE, Canadá, México y Australia del arancel del 25% sobre la importación de acero y 10% sobre el aluminio que aplicó el 1 de marzo. Las visitas del presidente Emmanuel Macron y la canciller Angela Merkel seguramente tendrán un efecto positivo. Si así fuera, se mantendría el arancel sólo para China y otros países no aliados de EEUU. En cualquier caso, la importación de acero chino por parte de EEUU es relativamente baja.
Pero una noticia mucho más importante que se podría confirmar en los próximos días o pocas semanas es un principio de acuerdo entre EEUU, Canadá y México para la renegociación de NAFTA. Según apunta el semanario británico The Economist, la octava ronda de negociaciones de NAFTA, que se celebra en las afueras de Washington, puede producir en los próximos días o semanas un principio de acuerdo para mantener una zona de libre comercio que genera intercambios comerciales por valor de un billón de dólares y de la cual dependen 14 millones de empleos en EEUU.
México y Canadá aceptarían que el acuerdo tuviera que volver a negociarse dentro de cinco años. Se elevaría el porcentaje de componentes para la fabricación de automóviles que tienen que ser de uno de los tres países del 62% al 75% (Trump pedía 85%) y EEUU no aceptaría que las disputas entre inversores y gobiernos pudieran acabar en los tribunales, cómo sucede en la actualidad. En los casos que afectan a EEUU, las disputas se dirimirían en tribunales de EEUU.
Otra señal positiva es que el probable próximo presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, presentó a los que serían sus ministros si gana las elecciones presidenciales en julio. El candidato del partido Morena parece haber elegido a personas con un perfil técnico, por lo menos en el caso de la futurible ministra de Economía Graciela Márquez (con doctorado de Harvard y licenciada en Económicas) y Carlos Manuel Urzúa, que ocuparía la cartera de Hacienda. Urzúa desempeñó el cargo de secretario de Hacienda del Distrito Federal entre 2000 y 2003. Según apunta The Economist, el 18 de abril el candidato a ministro de Economía bajo López Obrador (Márquez o Urzúa) declaró que se respetaría lo acordado en las negociaciones en caso de triunfo de López Obrador en julio.
Dicho principio de acuerdo tendría que ser concretado a nivel técnico y ratificado por los parlamentos de los tres países. Irónicamente, dónde se presentarían más problemas es en el Congreso de EEUU, ya que la mayoría republicana del Senado es mínima (51 a 49), y los Demócratas no querrán conceder un triunfo a Trump cuando en noviembre tienen posibilidades de recuperar el control de la Cámara de Representantes