Carlos Tavares (PSA): “Los Gobiernos pujan por los eléctricos pero no dicen quién los va a pagar”
El presidente de PSA es partidario de la neutralidad tecnológica a la hora de hacer frente a los retos medioambientales
El presidente de PSA, Carlos Tavares, acude al Salón de Ginebra con los nuevos Peugeot 508, Citroën C4 Cactus y la nueva Berlingo como grandes lanzamientos del grupo. En su presentación a la prensa, el máximo dirigente de la automovilística francesa, ahora dueña además de Opel, ha recordado los “resultados históricos” que el grupo presentó la semana pasada, con un incremento de las ventas del 15% y del beneficio neto del 11%.
Pese a que la compañía ya ha presentado su estrategia de electrificación de sus modelos, que supone que el 100% de los mismos tendrán versión enchufable para 2025, Tavares se quejó, en un encuentro con la prensa, de “la excesiva presión para llevar adelante esta transformación” por parte de los Gobiernos “sin que nadie esté explicando al consumidor quién va a pagar la factura de esta transición acelerada”. Tavares se refirió, entre otros extremos, a la necesidad de la instalación de infraestructuras de carga “que las automovilísticas no van a pagar, por descontado, porque no es nuestro negocio” (aunque competidores como Ford, Volkswagen, Daimler y BMW tienen una empresa conjunta llamada Ionity que está desarrollando una red de recarga por Europa).
Además, apuntó que los combustibles diésel y gasolina llevan un fuerte recargo de impuestos en el precio “que habrá que recaudar de otra manera”, señaló. “Nadie está hablando de la factura del eléctrico ni quien la va a pagar”, recalcó. Tavares ya se ha posicionado en ocasiones a favor de “la neutralidad tecnológica” a la hora de reducir las emisiones contaminantes de la industria del motor.
El presidente reconoció que las negociaciones para adjudicar el Opel Corsa a la fábrica de Zaragoza han sido “muy duras” pero aseguró que los sindicatos “han sido muy responsables y maduros” para hacer frente a los recortes necesarios. Sin embargo, avisó de que “sí había alternativa para ubicar el Corsa” en caso de no haber firmado. “Yo no hago pantomimas”, aseguró. “Necesitamos lograr que todas las plantas del grupo estén en el nivel más alto de productividad y rentabilidad”, dijo.