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La evolución actual de los autónomos pone en peligro sus propias pensiones

En 2017 se ha registrado un crecimiento neto de 14.000 personas en el RETA y los jubilados autónomos han sido más de 12.600, en ese mismo periodo.

La situación a medio plazo del colectivo de autónomos en España parece no solucionarse pese a las recientes medidas legislativas puestas en marcha por el Gobierno. La Unión Profesional de Trabajadores Autónomos (UPTA) ha analizado la situación del colectivo con un estudio comparativo de las pensiones en los tres últimos años, donde queda patente que los actuales inscritos en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), 3,2 millones de personas, apenas pueden cubrir los gastos en pensiones, que al cierre de 2017 ascendieron a 1.255.288 euros.

De hecho, el crecimiento neto de autónomos activos en el último año apenas superó las 14.000 personas, mientras que el número de jubilados en ese mismo periodo sobrepasó las 12.600; en concreto, se pasó de los 1.269.278 de enero a los 1.281.884 registrados en diciembre.

Como denuncia el colectivo, esta cuestión que pone de manifiesto las escasas altas registradas, en comparación con el gasto. Alertan de que esta situación se perpetuará en el tiempo. Y es que, el crecimiento del gasto no es un fenómeno puntual de un año. En los anteriores, 2016 y 2015, ya se contabilizaron subidas. Concretamente, la base comparativa de los meses de diciembre demuestra esta tendencia al alza: 1.206.519 euros en 2015 y 1.331.888, el segundo periodo. En los dos últimos años, el gasto en pensiones se ha incrementado en más de 49 millones de euros.

Crecen los gastos pero no las pensiones

Pero este incremento del gasto no está relacionado con la última subida en las pensiones aprobada por el Gobierno. De hecho, la media de 2017 se fijó en 641,93 en diciembre; en 2015 fue de 633,54 y en el mismo mes de 2013 era de 606,71. Más bien, el gasto se debe a una falta de renovación de autónomos en el sistema: los “puestos” que se jubilan no son repuestos con ‘savia nueva’, lo que hace que, en el medio plazo, haya “un estrangulamiento económico del sistema”, denuncia el presidente de UPTA Eduardo Abad. Tras analizar estos datos, adelanta una ronda de negociaciones con diferentes agentes económicos para reclamar al Gobierno nuevas reformas legislativas que afecten al sistema de pensiones “de manera estructural”.

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