Arcelor abrirá dos centros en España para el cambio digital del grupo
Los complejos tecnológicos de Avilés y Olaberria formarán parte de una red de excelencia España concentra ya la tercera parte de los doce laboratorios del líder del acero
ArcelorMittal apuesta por España en el proceso de transformación del grupo hacia la “Industria 4.0”. El líder mundial del acero y de la minería ha abierto sendos centros de excelencia digital en Avilés (Asturias) y Olaberria (Gipuzkoa) que forman parte de una red de complejos científicos repartidos además por Francia, Bélgica, Luxemburgo y Polonia.
En una jornada en París sobre el futuro de la siderurgia, Win Van Gerven, consejero delegado para la división europea de productos planos de ArcelorMittal, manifestó que el sector vive en 2017 los cambios tecnológicos “más rápidos” de los últimos veinte años.
Los ingenieros de Avilés ya han desarrollado para la multinacional una plataforma de datos denominada “Arhur” y una tecnología de programación lineal, inspirada en los movimientos de las hormigas, identificada como Klip.
El centro de Olaberria, por su parte, trabajará en desarrollo ágiles de software y en tecnologías en la nube, que darán soporte a las webs y a los teléfonos móviles del grupo.
Sobre China, Aditya Mittal reconocó que ha reducido su capacidad de producción de acero pero sigue sin competir en igualdad de condiciones
En Ilva, ArcelorMittal invertirá 2.400 millones para que aumente su fabricación anual a 8 millones de toneladas. La CE estudia su compra por parte de la multinacional
Con una docena de complejos científicos en el mundo, ArcelorMittal cuenta en España con una tercera parte de esa red de conocimiento. Además de las citadas instalaciones de Avilés y Olaberría, la corporación de la familia Mittal tiene laboratorios en Sestao (Bizkaia) y en la propia localidad asturiana para lograr avances relacionados con el acero.
ArcelorMittal quiere conseguir con estos desarrollos una mejora de la productividad del 10% y “con el mismo equipo”, en el sentido de que migrará los puestos de trabajo “de repetitivos a creativos”. En la jornada de París no se habló de ajuste laboral alguno.
El grupo quiere consolidar un modelo de negocio centrado en la “bobina virtual”, que no tiene fronteras ni físicas ni técnicas. En la actualidad, el 90% de sus clientes, que realizan sus pedidos por internet, pueden conocer en minutos la marcha de su pedido, lo que antes requería de días.
Cada bobina tiene su correspondiente gemelo digital en la nube con un código de barras propio que registra cualquier incidencia o fallo en el proceso o el producto.
Este avance también recorta los costes industriales, de almacenamiento y logísticos. En sus investigaciones, ArcelorMittal ha colaborado con la Universidad de Oviedo.
Aditya Mittal, consejero delegado del grupo para Europa y director financiero de toda la corporación, se refirió en varias ocasiones a las operaciones en España en la jornada de París. El año pasado, ArcelorMittal invirtió casi 250 millones en el país, principalmente en Asturias (226 millones), Etxebarri-Bizkaia (36), Sagunto-Valencia (11) y otros 9 millones en sus instalaciones en Gipuzkoa.
En la primera comunidad, Aditya Mittal destacó la producción de acero para paneles fotovoltaicos y para la alta velocidad ferroviaria. Sin olvidar que de las instalaciones de Gijón salieron 5,3 millones de toneladas para la construcción del primer parque flotante de eólica marina del mundo, inaugurado por Statoil frente a la costa de Escocia.
Sobre la compra de la siderúrgica italiana Ileva, una operación que investigan las autoridades de Bruselas, ArcelorMittal invertirá 2.400 millones para aumentar su capacidad en tres millones de toneladas y situarla en ocho millones de tonelada.
Aditya Mittal también se refirió China. Elogió la reducción de la capacidad de sus siderurgia en 120 millones de toneladas y evaluó que su exceso de oferta solo se sitúa ahora en 2,5 millones, después de años de inundar con su acero el mercado europeo. De todas formas, el directivo señaló que todavía hay muchos factores a favor de la industria del país comunista, “porque yo tengo que correr una Marathon de 26 millones y China de solo 11 millas”. Sí alabó a las autoridades comunitarias por no reconocer a China como economía de mercado.
A su juicio, el brexit será positivo para Europa porque a la larga fortalecerá a su industria. La multinacional, que tiene en España 11 fábricas y 9.400 trabajadores, mantendrá sus planes en Reino Unido sin cambios