Los autónomos quieren un coche para todo
El éxito está en un vehículo apto tanto para la vida profesional como la personal
Los autónomos saben lo que quieren. El coche comercial preferido por los trabajadores independientes se mueve sin complejos entre el mundo profesional y el personal. Usar la furgoneta para llevar a los niños al colegio y transportar cualquier útil de trabajo empieza a ser tendencia entre el colectivo y los modelos y las marcas se deben adaptar a ello.
El difícil acceso al crédito empuja también las compras de segunda mano de lo que es, para la mayoría, su principal herramienta de trabajo. Sin embargo, los datos de Anfac (Asociación de Fabricantes de Automóviles y Camiones), Faconauto (patronal de los concesionarios) y Ganvam (agrupación de vendedores) despejan las dudas: “En los ocho primeros meses del año, los autónomos han matriculado más de 43.000 vehículos comerciales, casi un 13% más que en el mismo periodo de 2016”.
Solamente durante el mes de agosto, los autónomos adquirieron un 28% más de vehículos comerciales que en el mismo mes de 2016; en total, 4.683. A esta cifra se suma las ventas de ocasión, lo que directamente refleja una mejora de su actividad y de la economía.
Los mismos datos de las patronales de la automoción confirman que Citroën es el fabricante preferido por los trabajadores independientes y, en concreto, el modelo Berlingo es la estrella este 2017. “Sabemos que esta furgoneta es para los que buscan un modelo polivalente, que pueden utilizarlo tanto en su actividad profesional como en su tiempo de ocio”, confirman desde la marca francesa.
Los transportistas independientes sufren la falta de ayudas
Por eso las cifras de Anfac reflejan un crecimiento de matriculaciones del 25% en lo que va de año. En 2016 se inscribieron 18.000 unidades de este modelo en España. Y en el periodo que va de enero a agosto de 2017 ya superan las 14.000 en todas sus versiones y tipos de gama. Además, el precio arranca en 6.900 euros para el modelo más básico, lo que lo posiciona entre los más asequibles.
Escasa financiación
12,6% se han incrementado las matriculaciones en lo que va de año, impulsado por los autónomos. En total, 43.304 unidades vendidas.
18.000 unidades de la furgoneta Citroën Berlingo se vendieron en 2016. Hasta el mes de agosto ya habían superado las 14.000 matriculaciones de este modelo. Tras ella: Dacia y DFSK.
6.900 euros es el precio de salida del modelo comercial más vendido de Citroën y 13.900 euros, la versión especial 20 aniversario.
Pero ayudas, pocas. Los autónomos lo tienen difícil a la hora de adquirir un vehículo, y en la mayoría de ocasiones son seducidos más por facilidades de pago y ofertas de las marcas que por lo que las deducciones fiscales revierten en sus cuentas.
“Existen diferentes subvenciones, incluso planes de renovación, para algún tipo específico de vehículo, como eléctricos, híbridos o de hidrógeno, pero no en todas las comunidades autónomas por igual”, indica Jorge Serrano, coordinador de la sectorial de transporte en la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA).
Únicamente en el caso de los transportistas (con camiones o furgonetas) “se puede deducir el 100% de las cuotas del IVA, tanto en la compra del vehículo como en los posteriores recambios, combustibles, talleres, etc.”, precisa.
“Es un bien necesario para realizar nuestra actividad empresarial y se lleva la mayor parte de los recursos económicos. Tanto el precio de compra como el de su mantenimiento es altísimo, y a eso hay que sumar su rapidísima depreciación”, señala Serrano.
Precisamente, las cuentas no cuadran en el colectivo de transportistas, aquellos autónomos que dependen al 100% de un vehículo para realizar su actividad. A Antonio Villaverde, portavoz de la Agrupación de Transportistas Autónomos de Madrid, las cifras le preocupan: “Dos tercios de lo facturado se va directamente a mantener y pagar el vehículo”.
“Cada día es más difícil salir adelante como autónomo y esto repercute en la inversión que hay que hacer a la hora de renovar el vehículo”, añade el transportista. “Directamente tenemos que ir al mercado de ocasión, lo que se refleja en un parque envejecido”, concluye.
Los encantos del ‘made in Spain’
Dos décadas. La furgoneta Citroën Berlingo es un modelo made in Spain, salido directamente de las líneas de producción de la factoría que el grupo PSA tiene en Vigo. Este vehículo celebró en 2016 su 20 aniversario y desde entonces ha evolucionado y ofrece opciones diferentes tanto para los profesionales, en su versión furgón, como para familias (las versiones Multispace).
Modularidad. El modelo comercial de Citroën triunfa entre los autónomos por su flexibilidad, con tres asientos independientes en la segunda fila y hasta siete plazas. A ello se le añade un maletero de 3.000 litros. Sus detractores, por el contrario, critican “su nada actualizado diseño y la escasez de equipamiento en las versiones más baratas”. Además, ahora se vende también con motor 100% eléctrico.
Camión estrella. Citroën lleva un año de éxitos, ya que los datos de las patronales Anfac, Faconauto y Ganvam le posicionan también como el fabricante más vendido en el segmento de camiones y furgones de mayor tamaño. En 2017 desbancan a otro grande: Iveco.
Transporte en auge. El incremento en las matriculaciones de vehículos comerciales ligeros está directamente relacionado con el auge del reparto de mercancías dentro de las ciudades. Esta mejora del sector, a su vez, se debe al crecimiento notable del comercio electrónico. Además, la figura del transportista autónomo ha cobrado fuerza con la crisis, pero “su acceso a los vehículos se dificulta ante los problemas de financiación”, matizan desde ATA.