Globalia baraja desprenderse del negocio de agencias de viajes
Ha cerrado 490 puntos de ventas, un 35% del total, desde 2009 La apuesta pasa por impulsar Air Europa Express para los viajes de corto y medio radio
Globalia afronta un incierto futuro. La salida voluntaria de Pedro Serrahima de la dirección general del grupo, hecha pública el martes, por sus discrepancias con el consejero delegado Javier Hidalgo es solo un síntoma del tenso ambiente que se vive en un grupo que vive en el alambre desde hace ya tiempo. Solo un mes antes se produjo la salida de José María Hoyos, director general de Halcón Viajes, dentro del plan de reorganización que Serrahima e Hidalgo estaban realizando de cara a una posible venta. Ambos se conocieron en Pepephone y tienen una buena amistad, rota por las diferencias sobre la gestión del grupo.
En el escaparate colocaron a la división minorista (Halcón Viajes) y la división mayorista (Travelplan). Ante los insistentes rumores que apuntaban en ese sentido, especialmente en el primer caso, Serrahima envió una carta el pasado 9 de junio a los empleados para tranquilizarlos y justificó la salida de Hoyos. “Muchas veces los cambios requieren personas diferentes, y eso no dice nada malo de quien no está. Más bien al revés, ha sabido estar dedicando muchos años a la compañía y ha sabido, con la misma elegancia y profesionalidad, no estar cuando hay que hacer cambios”, decía la misiva.
Lo que los empleados se temen, según fuentes sindicales consultadas por este periódico, es una venta a otro grupo o una nueva tanda de despidos tras los efectuados en 2012. En esa fecha se propusieron 580 despidos en las agencias de viaje que finalmente se redujeron a 450, de los que una parte fueron salidas voluntarias con indemnizaciones de 30 días por año, con un máximo de 18 meses y un tope de 35.000 euros. En ese expediente también se cerraron 160 puntos de venta. Todo ello condujo a que la división minorista volviera a números positivos en 2014.
Pese a ello, el goteo de cierres ha sido permanente, pasando de 953 en 2014 a 903 a finales de 2016. Cincuenta puntos de venta menos, de los que 22 pertenecían a Halcón Viajes y 28 a Viajes Ecuador. La comparación con las cifras de 2009 es demoledora. En ese año había 1.393 agencias, de las que 967 eran de Halcón Viajes, 328 de Viajes Ecuador y 98 de Halcón Viagens. Siete años después, la cifra ha bajado a 903, lo que supone un ajuste del 35% y de 490 puntos de venta. La parte más importante del ajuste se la llevó Halcón Viajes, con 322 agencias menos, un 66% del total. Esas mismas fuentes apuntan que la opción más lógica parece la venta a otro grupo, una vez que se ha reducido de forma significativa el número de oficinas y de empleados.
La prioridad de Globalia pasaría por centrarse en relanzar la división aérea, que es la que le aporta más ingresos, con un 47% del total del grupo. El primer hito de esta apuesta sería la aerolínea de bajo coste Air Europa Express que competiría con Level, la enseña de bajo coste de Iberia. El objetivo de esta nueva firma, puesta en marcha el pasado ejercicio, es reducir las pérdidas que acumula la citada división o incluso rentabilizar el negocio del corto y medio radio. En la actualidad opera con once aviones Embraer y la compañía presidida por Juan José Hidalgo ha pactado con los sindicatos que no podría asumir más del 25% de su producción anual.
La segunda parada de esa estrategía pasaría por suscribir alianzas como la firmada en mayo con Ryanair para atender los vuelos de larga distancia. De esta manera, la compañía irlandesa ofrecerá a sus 130 millones de clientes las 20 rutas a América que opera la compañía del grupo Globalia. Ryanair venderá billetes de Air Europa en su web y le cobrará una comisión. “El acuerdo pone a Madrid y a Air Europa en una situación muy ventajosa”, aseguró el consejero delegado, Javier Hidalgo, durante la presentación del acuerdo, en la que se atrevió a vaticinar que permitirá a la compañía crecer a un ritmo mayor que el 6% actual. En 2016 transportó a 10,67 millones de pasajeros, un 4,4% más que en el ejercicio anterior y la cifra más alta de los últimos cinco años. La aerolínea de Globalia pretende aprovechar el tráfico que lleve Ryanair de Europa a Madrid para aumentar el de sus vuelos a América. “Nos ayudará a bajar los precios, aunque no seremos una compañía low cost”, dijo Hidalgo.
El tercer hito en la apuesta por relanzar el negocio aéreo pasa por la incorporación progresiva de los 14 Boeing 787 Dreamliner que compró al fabricante norteamericano hasta 2022. En 2016 ya se incorporaron cinco de esas aeronaves, con las que espera mejorar sus cifras de capacidad. El objetivo final pasa por impulsar unos ingresos y un beneficio que crecen, pero más despacio que los de la competencia, pese al récord de llegada de turistas extranjeros y de tráfico aéreo de los últimos dos ejercicios.