El Banco de España eleva su optimismo: el PIB crecerá un 3,1% este año
La entidad eleva tres décimas su previsión de crecimiento respecto a la hecha en abril Espera una "moderación del crecimiento" a medida que avance el periodo 2017-2019
El Banco de España ha vuelto a elevar sus previsiones de crecimiento de la economía española para el periodo 2017-2019. En concreto, la entidad prevé que el PIB avanzará un 3,1% este año, tres décimas más que lo previsto en su anterior proyección hecha en abril. Para los dos años siguientes prevén avances del 2,5%, para 2018 y del 2,2% en 2019.
Estas proyecciones prevén "una prolongación de la fase de expansión de la economía española a lo largo del periodo 2017-2019, apoyada en ganancias de competitividad acumuladas desde el inicio de la crisis, los avances del proceso de des de desendeudamiento del sector privado y la persistencia de unas condiciones financieras favorables".
No obstante, el Banco espera que "a medida que vaya transcurriendo el periodo proyectado, se espera que tenga lugar una moderación del crecimiento de la actividad del empleo, conforme terminen de desvanecerse los efectos desfasados de algunos impulsos expansivos que han operado en el pasado".
En concreto, consideran que los riesgos para el crecimiento del PIB "se orienta moderadamente a la baja" y principalmente en relación con el contexto exterior, por el proteccionismo comercial y un hipotético endurecimiento adicional de las condiciones financieras globales.
Paro del 13% a finales de 2019
Estas previsiones incorporan también "el mantenimiento de ritmos elevados de creación de empleo, que se irán moderando conforme avance el periodo", en consonancia con el resto de la actividad, precisan los expertos del Banco de España.
Estas mejores perspectivas para el mercado laboral permitirán "descensos adicionales de la tasa de paro, cuyo nivel descenderá al entorno del 13% a finales de 2019", según estas estimaciones.
En cuanto a los precios, esperan una ralentización del avance del IPC en lo que resta de año, por el comportamiento a la baja de los precios de la energía. Pero, por el contrario, prevén una "senda moderadamente ascendente" de la inflación subyacente. El resultado de ambas cosas será que el IPC crezca el 2% en medias anuales en 2017, e incrementos más moderados en adelante, del 1,3% en 2018 y del 1,6% en 2019.