Hacienda investiga más a las pymes y detecta menos fraude
En los últimos años, la Agencia Tributaria ha centrado sus investigaciones en trabajadores, pymes y autónomos, aunque son las grandes corporaciones las que suponen el 70% del fraude fiscal
El Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) ha publicado una nota en la que denuncia que durante 2015 no se detectó más del 90% de la evasión fiscal que se produjo en España. Un dato que, para el sindicato, deja al descubierto un “enorme agujero” en la administración tributaria y “un grado de ineficacia muy elevado”.
Según Gestha, la evolución que ha seguido la deuda liquidada media en los últimos años demuestra que la Agencia Tributaria centró sus investigaciones en los contribuyentes con menos recursos, como son las pymes, los autónomos y los trabajadores, mientras que decayeron las inspecciones a los grandes patrimonios o corporaciones, que, actualmente acaparan el 70% del fraude fiscal español.
Así, Gestha subraya que, aunque en 2015 se investigó a más contribuyentes que en 2010, la deuda defraudada descubierta fue menor, lo que demuestra, a su juicio, que las pequeñas y medianas empresas cometen menos fraude fiscal que las grandes. Sin embargo, los delitos fiscales descubiertos por la Agencia Tributaria en 2015 han caído en un 57% en la última década.
Este desplome se debe, según Gestha, a la limitación de las competencias de los técnicos de Hacienda para investigar estos delitos, tras aprobarse una resolución interna por la cual los inspectores dejaron de tener control sobre los expedientes de especial dificultad sobrevenida, es decir, cuando se descubre delito fiscal, simulación, conflicto o fraude de ley. En estos casos, el expediente pasa a manos de un cargo superior que no conoce la investigación realizada hasta el momento, lo que se traduce en retrasos y riesgo de prescripción del posible delito.
En opinión del sindicato, los datos ponen de manifiesto que la Agencia Tributaria sigue optando por perseguir el fraude más fácil de detectar, en lugar de centrar sus investigaciones en los delitos más sofisticados y complejos. Por todo ello, Gestha ha reiterado la necesidad inaplazable de desarrollar un plan de lucha contra el fraude fiscal “realista y eficiente”, con el que, según sus estimaciones, podrían recaudarse a medio plazo hasta 40.000 millones de euros.