Los grandes contribuyentes de Patrimonio suben un 34%
Las autonomías ingresaron 937 millones en 2014 por el impuesto sobre patrimonio
El impuesto de patrimonio se ha convertido en un tributo de ida y vuelta. El Ejecutivo liderado por José Luis Rodríguez Zapatero suprimió este impuesto en 2008, cuando España aún disfrutaba de superávit público y los ingresos fiscales estaban en máximos históricos. El desplome de los dos años seguidos fue la excusa perfecta esgrimida por Zapatero para recuperarlo en 2011 y 2012. Posteriormente, Mariano Rajoy lo ha ido prorrogando año a año a lo largo de la legislatura, incluidas las cuentas de 2016. Toda vez que parece que no habrá Presupuestos Generales del Estado de 2017 y que habrá que prorrogar las cuentas de 2016, este tributo seguirá vigente el año que viene.
Y eso supondrá una inyección muy importante para las comunidades autónomas, ahogadas por una senda de déficit público imposible de cumplir. Los datos hechos públicos ayer revelan que el impuesto de patrimonio dejó en las arcas autonómicas 937 millones en 2014, lo que supone la cifra más elevada desde que volvió a entrar en vigor en 2011. En el reparto por comunidades autónomas, la más beneficiada es Cataluña, con 429 millones de euros, lo que supone un 45,8% del total de lo recaudado. El hecho de que haya bajado de 700.000 a 500.000 el mínimo exento para tributar ha provocado que el número de contribuyentes afectados sea mayor que en el resto de comunidades autónomas. En segundo lugar, ya a mucha distancia, aparece la Comunidad Valenciana, con 107,1 millones de euros, un 11,4% del total.
En el otro lado figura Madrid, la única autonomía que no ingresa ni un euro por este tributo ya que lo tiene bonificado al 100%. Eso, sin embargo, no exime a los contribuyentes de incluir en sus declaraciones los bienes de los que son titulares, lo que le sirve a Hacienda para conocer la evolución de los bienes declarados y el dinero que dejan de pagar. En 2014 la cifra se elevó a 660 millones de euros. El Ejecutivo presidido por Cristina Cifuentes considera, sin embargo, que esta menor recaudación se ve compensada más de que de sobra por el traslado de domicilio de un gran número de rentas altas, que se han instalado en Madrid al verse beneficiados por la bonificación de este tributo.
Un contribuyente con bienes por un valor superior a los cuatro millones de euros no pagará en Madrid, mientras que la factura en Extremadura, la comunidad con los tipos más elevados, será de 54.819 euros, seguida por Andalucía o Galicia, con 44.214 euros, y Cataluña, con 41.943 euros.
En el mayor peso de los ingresos del impuesto de patrimonio también ha tenido un peso determinante el incremento de los contribuyentes con bienes declarados por encima de los seis millones de euros. En 2011, había 4.365 declarantes con bienes entre 6 y 11 millones y 352 por encima de los 30 millones de euros. Sumaban 4.717 contribuyentes que podían ser considerados rentas altas. Tres años después, esa cifra se elevó un 34,4% hasta los 6.341 contribuyentes, con un incremento del 44% para los declarantes de más de 30 millones de euros (de 352 a 508).
Pese a suponer una inyección muy importante para las autonomías, los expertos de la Fundación Impuestos y Competitividad (una asociación formada por Baker & McKenzie, Cuatrecasas, Deloitte, EY Abogados, Garrigues, KPMG, PWC y Uría Menéndez) abogan por la desaparición de este tributo y una reorganización de Sucesiones y Donaciones en la próxima reforma de la financiación regional con tipos homogéneos. Consideran que genera distorsiones en la economía y que tiene una escasa capacidad recaudatoria.
Lo que proponen los partidos para este tributo
Partido Popular: Apuesta por una reforma de la fiscalidad patrimonial en el marco del cambio del sistema de financiación autonómica, sin más detalle.
PSOE: Los socialistas defienden tipos mínimos en Patrimonio y Sucesiones para evitar que las comunidades dejen sin efecto ambos tributos.
Ciudadanos: Aboga rebajar el gravamen y elevar en torno al millón de euros el mínimo exento del impuesto sobre el patrimonio (en la actualidad son 700.000 euros)
Podemos: Defiende que el que el impuesto sobre el patrimonio se aplique a partir de 400.000 euros.