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Mercado inmobiliario

El fracaso de la opa de Slim por Realia se convierte en un éxito para el magnate

El magnate mexicano Carlos Slim, a la derecha, junto a su hijo Carlos Slim Domit.
El magnate mexicano Carlos Slim, a la derecha, junto a su hijo Carlos Slim Domit.Reuters
Alfonso Simón Ruiz

El fracaso de la opa de Carlos Slim sobre Realia es un éxito para el propio magnate mexicano. Así lo aprecian los expertos del mercado, debido a que el inversor azteca ya controla la compañía, por lo que no tendrá que desembolsar 258 millones de euros.

El plazo de aceptación de la opa de Slim, a través de Inversora Carso, finaliza mañana. No se espera que ninguno de los grandes accionistas venda su participación, ya que el precio ofrecido por el multimillonario –el tercer hombre más rico del mundo– es de 0,8 euros, por debajo de los 1,02 euros con los que cerró acción de la inmobiliaria ayer.

El millonario descarta repartir dividendos

En el folleto enviado el pasado 4 de mayo a la CNMV, Inversora Carso admitió que en tanto en cuanto no cambie la situación de Realia “y se reduzca su endeudamiento financiero, no tiene intención de distribuir dividendos”.

Realia, que comenzó a cotizar en junio de 2007, solo ha repartido dividendos en sus dos primeros años en Bolsa. Esta empresa fue creada con los activos inmobiliarios de Caja Madrid (actual Bankia) y FCC, que actualmente mantiene más de un 36% de la compañía.

En los últimos meses, Carlos Slim, dueño del 30,6% a través de Carso, ha iniciado completo proceso de reestructuración de la deuda de la inmobiliaria. En abril liquidó el último de los pagos de una deuda que ascendía a 802 millones, que Realia tenía con diversos fondos. Por otra parte, la división de patrimonio deberá afrontar el vencimiento en 2017 de 750 millones de un préstamo sindicado.

La operación de Carso llegó tras superar el 30,3% del capital, a pesar de que en principio la empresa mexicana adelantó que pediría la exención de esa obligación, ya que como principal accionista figura FCC, con el 36,9%. Pero la CNMV consideró que el poder de Slim sobre Realia supera su propia participación, ya que a su vez controla FCC. Así que finalmente se vio obligado a presentar una opa.

Slim, de hecho, se encuentra también en un proceso de opa sobre la totalidad de FCC, admitida a trámite por la CNMV. La constructora ya comunicó oficialmente que no acudiría a la opa de Slim en Realia.

Se prevé que otros grandes accionistas, como el fondo británico Polygon (10,1% del capital) difícilmente vendan su participación. De hecho, esta firma envió sendas cartas a la CNMV y al consejo de administración de la inmobiliaria reclamando que el precio ofrecido por Slim era inferior al que ellos consideraban como equitativo.

Con mucha probabilidad se repetirá lo sucedido con la primera opa de Slim sobre Realia, en julio del pasado año, cuando el empresario ofreció 0,58 euros por título para competir con la presentada por la socimi Hispania a 0,49 euros. Entonces, el porcentaje de adhesión se quedó en el entorno del 1% del capital, ya que el valor superaba los 0,7 euros de cotización.

A Slim no le hace falta desembolsar los 258 millones ya que gracias a su participación directa y a la de FCC, controla la compañía. Por eso, ya situó a hombres de su confianza al frente de la inmobiliaria. Los mexicanos Juan Rodríguez Torres, presidente, y Gerardo Kuri, consejero delegado, son los más relevantes. Pero en el consejo de administración también se sienta a su compatriota Carlos Jarque, primer ejecutivo de FCC, y a otros dos dominicales en representación de la constructora.

Sobre la firma

Alfonso Simón Ruiz
Graduado en Economía y máster de Periodismo UAM / EL País. En Cinco Días desde 2007. Redactor especializado en información empresarial, especialmente sobre el mercado inmobiliario, operaciones urbanísticas y, también, sobre la industria farmacéutica y compañías sanitarias.

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