¿Qué consecuencias tendría el adiós a los billetes de 500 euros?
Los billetes de 500 euros pueden desaparecer en los próximos años si el Banco Central Europeo adopta esta decisión en la reunión de hoy 4 de mayo. Con ello, aceptarían una recomendación de los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea (Ecofin) que una reunión de febrero encaminada a analizar el origen de las fuentes de financiación del terrorismo y otras actividades ilícitas, señalaron la importancia de los billetes más grandes de euro en este tipo de actividades. Con ello solicitaron que el BCE analizara “con cautela”, la posibilidad de retirada, por su papel de realizar grandes pagos sin dejar rastro en el sistema financiero.
Este análisis es el que realizará el consejo de gobierno del Banco Central Europeo (BCE) en su reunión de hoy 4 de mayo, en el que presumiblemente se dicte su eliminación y en que formas se producirá. Las posibilidades son muy variadas. Se puede dictar por ejemplo decretar su retirada pero con tiempo indefinido, es decir, que el usuario pueda cambiar los billetes en las oficinas de los bancos centrales de cada país sin fecha fija. Pero mientras tanto, se tiene que establecer fechas en las que dejarán de producir y emitir y lo más importante durante cuánto tiempo será medio de pago legal.
La medida no está exenta de costes importantes. Actualmente hay en circulación 600 millones de billetes de 500 euros, que deberán ser sustituidos por billetes de denominaciones más pequeñas, en concreto el peso más importante lo tendrán las denominaciones de 100 y 200 euros. Con lo que a la retirada de estos billetes habrá que unir la emisión de muchos más.
- En mínimos históricos ¿Situación coyuntural o no?
Todo ello se une a un momento en el que el número de billetes de 500 euros en España ha vuelto a marcar un mínimo histórico al caer en marzo hasta 64,8 millones de unidades, desde los más de 66,8 millones del mes anterior, con lo que desciende a su nivel más bajo desde octubre de 2004. Según los datos del Banco de España, esta cantidad de billetes de 500 euros, teniendo en cuenta los distribuidos menos los retirados en el país, tiene un valor de 32.398,6 millones de euros.
Estos datos, refleja la demanda de los bancos por estos billetes y que está relacionado con las peticiones de los clientes y no con el que puedan atesorar. Lo cierto es que la demanda a las entidades no ha hecho más que decrecer y la interpretación del dato es variada. Puede marcar que por un lado se estén realizando menos pagos con los mismos pero también que se guarden más por los menores incentivos de inversión en activos seguros como cuentas remuneradas o depósitos. De hecho, en España hay mucha más tradición en mantener dinero en efectivo, lo que le ha convertido en el país con más billetes de esta denominación en su poder.
- Un coste importante, una solución que genera dudas si no la acompañan otras
El billete de 500 euros por su alta remuneración sorprendió mucho en su concepción de origen. En países como España, donde la denominación más alta era de 10.000 pesetas -60 euros al cambio- billetes 100, 200 y 500 euros fue un cambio radical que como hemos dicho, por la tradición de usar y acaparar mucho dinero en efectivo fue acogido rápidamente. Pero su alto valor no sólo lo fue con respecto a monedas locales, lo fue también a nivel global. La moneda más usada, el dólar, tiene como denominación más alta al billete de 100 dólares, lo que hace que sea más discutible esta elección y más argumentos para la retirada. Frente a esta nos encontramos con costes y dudas.
La retirada de los mismos no genera mucho gasto, ya que es el poseedor del billete el que tendrá que cambiarlos acudiendo a la entidad financiera o sucursal de los bancos centrales de cada país que los acepten. El coste principal está en el coste de producir los nuevos billetes, la mayoría de 100 y 200 euros, que se estima que está entre 8 y 9 céntimos por unidad. Esto elevaría la factura en unos 500 millones de euros.
Asumido el mismo ¿Se disminuirán las transacciones con fines ilícitos? Seguramente el impacto de la medida será muy limitado si no le acompañan otras medidas. Se sustituirán los billetes de 500 por billetes de 200 y 100 sin que esto suponga un problema mucho más importante que hacer transacciones o acaparar efectivo con un número mayor de billetes. El problema está más en los límites de control en efectivo. Por ejemplo, en España el límite de pagos en efectivo está en 2.500 euros y sería positivo al menos considerar una reducción de los mismos.