¿Por qué es importante aprender a programar?
"Porque programar enseña a pensar". En PIXIE señalan "que la programación es como un segundo lenguaje en la era digital. Es una habilidad que permitirá a nuestros hijos convertirse en la nueva generación de innovadores y líderes”. "Y como cualquier lenguaje, la programación puede ser aprendida a edades tempranas con resultados extraordinarios".
"Los estudiantes que aprendan a programar estarán mejor preparados para la revolución tecnológica que se extiende por todas las culturas y derriba fronteras. El futuro demandará no solo programadores, sino profesionales que dominen el pensamiento computacional y lo sepan llevar a los campos de la medicina, la biología, el diseño y las artes. Además, la enseñanza de la programación a edades tempranas derriba preconceptos de género y anima a las chicas a pensar también en la posibilidad de estudiar carreras técnicas".
Y es así como Pixie nació en 2014 bajo esta perspectiva, de la mano de dos amigos que querían que sus hijos aprendieran a programar. Después de varios años de investigación y viajes a San Francisco, Boston y Londres, decidieron montar una startup que, generando un entorno propio de programación, permitiera a los niños un camino guiado para aprender programación.
Al equipo de fundadores, los ingenieros Luis y José, pronto se unieron Beatriz, ingeniera informática y Elena, una de las primeras mujeres licenciada en desarrollo de videojuegos. La empresa que les ayudó en el desarrollo, Billionlabs, pronto se adhirió como socia al proyecto.
Uno de los fundadores de Billionlabs, Farid Fleifel es uno de los inversores y CTO de BuyVip, una de las pocas startups que han tenido “salidas” de éxito al ser vendida a Amazon por 70 millones de euros.
Pixie es la primera plataforma europea seleccionada por Hour Of Code, una iniciativa apoyada por Google, los creadores de Facebook y Microsoft, Mark Zuckerberg y Bill Gates, y por el mismo presidente de Estados Unidos, Barack Obama; con la que ya se han iniciado en la programación más de 200 millones de personas en todo el mundo.
Ha desarrollado un nuevo lenguaje visual que permite programar mediante bloques que agrupan sentencias de código JavaScript y que encajan visualmente entre sí como si fueran piezas de LEGO, simplificando el ejercicio de la programación y evitando los errores de sintaxis.
Esta herramienta está integrada en una plataforma de aprendizaje online que permite a los niños, desde los ocho años, aprender a programar paso a paso en casa y en el colegio, a través de retos y juegos diseñados por educadores.
Al finalizar cada reto, Pixie ofrece la traducción a JavaScript de la solución creada por el niño. JavaScript, uno de los lenguajes más utilizados hoy en día en programación, es considerado el “lenguaje del futuro” ya que está pensado para añadir funcionalidad a las páginas web y es reconocido por todos los navegadores.
Pixie está inspirado en Scratch, el lenguaje de programación desarrollado en el MIT, una de las Universidades más prestigiosas del mundo. Pero, a diferencia de Scratch, Pixie no está basado en Flash, sino en HTML5, por lo que puede ser utilizado en cualquier navegador y dispositivo: PC, Mac, IPad, tablets o smartphones.
Pixie da respuesta a la demanda surgida por la inserción en varios países del mundo de la nueva asignatura de programación (Computer Science en el Reino Unido). En España ya es curricular en secundaria en la Comunidad de Madrid, y los profesores demandan herramientas que les permitan afrontar el desafío.
Los fundadores de Pixie pensaron desde el principio en su internacionalización. Ha sido seleccionada como una de las startups más innovadoras del mundo educativo que han tenido un lugar especial en BETT 2016 en Londres en la Feria de Educación y Tecnología más importante del mundo.
Y ya está cerrando acuerdos con algunos online marketplace y plataformas educativas de países como Estados Unidos, Reino Unido, Holanda y Francia. Dispone de más de 7.000 usuarios en más de 30 países.
Pixie ha sido una de las tres finalistas del Premio Vodafone a la Innovación en Telecomunicaciones 2015 y participa del programa de aceleración de Telefónica Open Future.