“High Tech está negociando con varias cadenas y fondos”
Es la cabeza visible de Petit Palace, la enseña hotelera con 33 establecimientos que este ejercicio cumple 15 años. Alfonso Castellano lleva al frente de la compañía poco más de un año, un tiempo en el que la marca bajo la que opera la empresa High Tech ha pasado de estar “dentro de una tormenta perfecta” a dejarse tantear por otros grupos hoteleros, así como por fondos de inversión internacionales.
Castellano explica que el inicio de la crisis económica coincidió con otros elementos que provocaron una “digestión pesada” para la compañía que creció mucho en pocos años y que se vio afectada por “la caída de la demanda, la caída del posicionamiento de Madrid como destino turístico, la dependencia del turismo nacional y la financiación de la deuda generada por el hipercrecimiento de los años previos”. Unas circunstancias que, según explica, hicieron que “se pusiera en cuestión la debilidad de la compañía”.
El proceso tuvo su punto más hondo hace 18 meses, un momento en el que según Castellano la empresa estaba “en el fondo del proceso digestivo”. A partir de ese momento, Petit Palace puso en marcha un cambio de estrategia que se ha visto favorecido además por la mejora de la industria turística.
Para la empresa, en el ejercicio 2015 “los resultados han sido realmente buenos. Hemos tenido crecimientos de las ventas por encima de la media del mercado. En destinos como Madrid, que ha registrado un alza del revpar –ingresos por habitación disponible– de entre el 9% y el 15%, nosotros hemos crecido por encima del 21%”.
Durante el pasado año, Petit Palace se anotó un ebitda de 10,4 millones de euros, “un 55% más que un año antes”, lo que ha impulsado que Petit Palace alcanzase un beneficio neto superior al millón de euros, lejos de las pérdidas de 42 millones registradas el año pasado.
En los últimos meses la compañía ha vuelto a generar interés por parte de otras cadenas, entre las que ha estado Hotusa, y de varios fondos de inversión internacionales, aunque por el momento no hay nada cerrado. “No es raro que generemos ese interés”, aclara. “Es una buena opción para incorporar un producto sano financieramente, con una marca de hoteles boutique reposicionada y con una estrategia concreta”.
Sin embargo, Castellano reconoce que su principal accionista, el grupo N+1 –que controla el 52% del capital–, “no tiene prisa”, y apunta que tras 14 años en el capital “lo raro es que no se haya ido bastante antes y que lo que cabría pensar es que si no se ha ido es porque no ha podido hasta ahora”. Con todo, Petit Palace trabaja en otras opciones de consolidación. Una de ellas es el acuerdo alcanzado hace algunos meses con la escandinava First Hotels. “Es una alternativa de consolidación suave en donde estamos compartiendo demanda. Y estamos invitando a otras cadenas hoteleras en Europa a unirnos en un proyecto de este tipo bajo un mismo paraguas”, dice.
Además, Petit Palace está trabajando en modelos de franquicia y en colaborar con servicios comerciales. “Tenemos un hotel firmado en Sevilla y otros 44 en cartera que esperamos ir cerrando a lo largo de 2016 en diferentes modalidades”. “Podemos crecer por primera vez desde 2004 y pensamos que en uno o dos ejercicios podríamos duplicar el tamaño de la cadena”, afirma.