Europa, en alerta tras la masacre terrorista de París
Siete de ocho terroristas que resultaron muertos llevaban explosivos en su cuerpo Repulsa internacional por los atentados
Bélgica, Alemania, Holanda, España, Italia y Turquía, que alberga la cumbre del G20, han decidido aplicar nuevas medidas para aumentar la seguridad y la vigilancia, tras los atentados terroristas de París, que han costado la vida al menos a 129 personas.
En este sentido, el Gobierno federal de Bélgica ha ordenado a la Policía elevar el nivel de seguridad y vigilancia tras los atentados en París, lo que implica también “registros sistemáticos” a la entrada de eventos públicos.
Las autoridades políticas y de seguridad de Bélgica permanecen en contacto permanente con sus homólogos franceses tras los atentados en Francia, indicó el primer ministro, Charles Michel, quien presidió este sábado una reunión del Consejo de Seguridad Nacional para analizar el estado de amenaza terrorista en Bélgica tras la tragedia en París.
El primer ministro explicó que el órgano de coordinación para el análisis de la amenaza no considera necesario en estos momentos elevar el nivel de amenaza, pero analiza la situación “minuto a minuto” en concertación con el Gobierno y el comité ministerial restringido en particular.
El Gobierno belga ha aumentado las medidas de seguridad en grandes eventos, como el partido amistoso que enfrentará el próximo martes a las selecciones de fútbol de Bélgica y de España en el estadio Rey Balduino de Bruselas, para lo que ha pedido que los aficionados no acudan al partido con mochilas.
En Alemania, la Policía ha reforzado su presencia en la frontera con Francia tras los atentados terroristas de anoche en París, aunque no se han establecido controles de pasaportes ni en las carreteras ni en los aeropuertos. La vigilancia se ha concentrado en el tráfico por carretera, ferroviario y también aeropuertos, indicaron hoy fuentes de la Policía federal, desde su sede central en Potsdam (junto a Berlín).
Especialmente reforzada es la presencia de las fuerzas de seguridad en las grandes estaciones, aunque por el momento no se han adoptado medidas tales como el control de pasaportes.
La canciller alemana, Angela Merkel, convocó este sábado una reunión de crisis con varios de sus ministros para analizar la situación, tanto en lo que concierne a la seguridad interior como a la coordinación de medidas con los países vecinos, especialmente con Francia.
Asimismo, el primer ministro holandés, Mark Rutte, anunció el incremento del estado de vigilancia y los controles fronterizos, sobre todo en lo que respecta al tráfico relacionado con Francia, lo que incluye los aeropuertos. En una rueda de prensa tras presidir un consejo de ministros extraordinario, Rutte anunció medidas de seguridad en tres áreas.
Todos los servicios pertinentes tendrán que estar en estado de preparación reforzado para poder responder con rapidez a posibles amenazas, la seguridad fronteriza se incrementará y se intensificará, especialmente para todo el tráfico hacia Francia, y se aumentará la vigilancia en grandes eventos
También la cumbre del G20 de Antalya (Turquía), que ya iba a ser una de las citas de este grupo de países que iba a contar con más medidas de seguridad, ha reforzado la vigilancia aún más, extremando los controles previstos para este evento.
A partir de este sábado han empezado a llegar los líderes de los países del G20 a esta reunión de Antalya de los días 15 y 16 de noviembre, en la que participarán, entre otros, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y el de Rusia, Vladimir Putin.
Las extremas medidas de seguridad ante cumbres de estas características ya se habían reforzado tras algunos actos terroristas en Turquía como el del pasado 10 de octubre en Ankara durante una manifestación en favor de la democracia y que provocó la muerte de casi un centenar de personas.
En España, el Consejo de Seguridad Nacional se reunió en el Palacio de la Moncloa bajo la presidencia del jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy. En el encuentro se intercambió información y se acordó el mantenimiento del nivel 4 de Alerta Antiterrorista (“Riesgo Alto“), adoptando el pasado 26 de junio, con ámbitos de seguridad reforzada.
A la reunión han asistido además de Rajoy, la vicepresidenta del Gobierno, los ministros de Defensa, Justicia, Interior, Hacienda y Administraciones Públicas, Fomento, Industria, Energía y Turismo, y Economíay Competitividad; así como el secretario de Estado de Asuntos Exteriores, el secretario de Estado de Seguridad, el secretario de Estado-Director del CentroNacional de Inteligencia, el jefe del Estado Mayor de la Defensa y el director del Departamento de Seguridad Nacional.
Durante la reunión, los distintos responsables del Gobierno en materia antiterrorista han informado de los continuos contactos que se están manteniendo con las autoridades francesas, a todos los niveles, incluido el de inteligencia.
Por su parte, el Gobierno italiano confirmó que ha elevado la alerta al nivel dos, que incluye la posibilidad de que intervengan “fuerzas de cuerpos especiales del ejército”, tras los atentados cometidos en París, anunció el ministro del Interior, Angelino Alfano.
“Hemos aumentado el nivel de seguridad, lo hemos situado en el nivel dos, que incluye la posibilidad de participación de las fuerzas de los cuerpos especiales del Ejército”, dijo Alfano a la prensa para comentar las medidas en vigor tras los atentados en París.
El ministro intervino después de la reunión de emergencia del Comité Nacional de Orden y Seguridad Pública presidido por el primer ministro, Matteo Renzi. El ministro agregó que han decidido la disponibilidad “de 700 militares para Roma”, e indicó que Italia está “en el nivel de alerta inmediatamente previo al máximo”.
Los atentados terroristas son los más graves de la historia contemporánea en Francia. El número de víctimas mortales ha ascendido a 129 con 352 heridos, de los que 99 están muy graves.
Los terroristas perpetraron una cadena de ataques coordinados registrados en la capital francesa (en dos restaurantes, la terraza de un bar y una sala de fiestas, así como en las inmediaciones del Estadio de Francia) y centenares los heridos. El presidente de la república, François Hollande, en una declaración institucional ha calificado el ataque como "un acto de guerra del Estado Islámico". Solo en la sala de conciertos Bataclan, donde cuatro hombres armados tomaron rehenes y que después fue asaltada por la Policía francesa, se produjeron 80 muertos. A lo largo de la jornada del sábado se han seguido rescatando cadáveres.
Siete de los ocho terroristas muertos en los atentados múltiples fallecieron al hacer explotar sus cinturones explosivos, informa la Fiscalía francesa. Tres de ellos lo hicieron en la sala de conciertos, donde un cuarto terrorista fue abatido, y otros tres aparecieron muertos en las inmediaciones del citado estadio, donde la selección gala disputaba un partido de fútbol amistoso contra Alemania, al que asistía el propio Hollande, quien fue evacuado de inmediato.
El punto que resultó más mortífero fue la sala de fiestas Bataclan, a menos de medio kilómetro de la sede del semanario satírico Charlie Hebdo, atacada el año pasado. Cuatro asaltantes irrumpieron durante un concierto del grupo estadounidense de heavy metal Eagles of Death Metal y acabaron con la vida de al menos 80 personas en un establecimiento con un aforo de 1.500.
Diversos testigos explicaron que habían visto llegar a varios hombres con fusiles kalashnikov que, a cara descubierta, dispararon indiscriminadamente contra los espectadores del concierto. Uno de esos testigos precisó a la emisora France Info que los asaltantes gritaban “Alá es grande”. Tras varias horas de enorme tensión en la que todas las miradas se concentraban en esa sala y en las que se habló de una toma de rehenes, la policía llevó a cabo el asalto pasada la medianoche.
El prefecto de policía, Michel Cadot, explicó que la operación fue “extremadamente importante” y, en declaraciones a iTélé señaló que los terroristas se recluyeron en la segunda planta y activaron unos cinturones de explosivos que llevaban. En declaraciones recogidas por Europe 1, la fiscalía informó de que tres de los cuatro asaltantes que mataron a unas 70 personas en la sala Batalclan llegaron a activar sus cinturones explosivos.
El cuarto fue abatido durante el asalto que lanzaron las fuerzas especiales en esa sala del centro de París. A pocos cientos de metros de ella, y también en el este de París, se produjeron tres tiroteos diferentes, en la calle Charonne, en el bulevar Voltaire, en la calle Alibert -junto al restaurante Le Petit Cambodge- y en la calle de la Fontaine Au Roi.
Consejo de Ministros extraordinario
Tras ser evacuado del estadio de fútbol, el presidente francés convocó un consejo de ministros extraordinario en el que se decretó el cierre de fronteras y el estado de excepeción. Después se ha dirigido a la sala Bataclan. En un mensaje al país, Hollande ha pedido a los franceses "sangre fría" y "unidad". Y añadió: "es un horror, pero no nos dejaremos impresionar (..) el combate será despiadado".
Unos 1.500 militares franceses patrullan las calles de París y las autoridades locales han pedido a los ciudadanos que no salgan de sus casas. La policía y el ejército buscan a varios terroristas implicados en los ataques que aún no han sido localizados. Pese a las medidas de excepción, aviones, trenes, metros y otros medios de transporte público de París circulaban esta mañana casi con total normalidad, informa Efe.
La empresa Aeropuertos de París (ADP) indicó que la situación en las dos plataformas de la capital, Charles de Gaulle y Orly, era “normal”, con solo algunos retrasos de hasta media hora por el reforzamiento de los controles y agregó que las aerolíneas mantenían sus programas de vuelos.
En España, hoy se celebra una reunión para evaluar si se eleva el nivel de alerta antiterrorista, que actualmente se encuentra en el nivel 4 sobre 5. El presidente, Mariano Rajoy, ha comparecido esta mañana y ha convocado el Consejo de Seguridad Nacional. Dirigentes de todo el mundo han expresado su conmoción por este atentado y se han puesto a disposición de Francia para cualquier necesidad. Los partidos políticos españoles han suspendido todos los actos que tenían previstos para hoy.