Plena libertad de los horarios
El grupo Carrefour quiere llevar al límite la libertad de horarios que proporciona la legislación española, y que solo se ha ensayado parcialmente en algunas comunidades autónomas. El grupo francés quiere abrir las veinticuatro horas del día en algunas tiendas de Madrid como experiencia piloto para ampliarla si fuere satisfactoria a otras ciudades del país. Por el momento solo se practicará con algunos supermercados urbanos estratégicamente situados para tratar de aprovechar la pujanza de la demanda dar respuesta a una creciente presencia de consumidores en todas las franjas horarias.
España dispone ahora de una de las normas más flexibles en la utilización del horario comercial, especialmente para los centros de tamaño medio y pequeño, que se ha llevado casi a su plenitid en las zonas de carácter turístico y de las grandes ciudades. Pero nunca ninguna firma se había planteado aprovechar todo el margen disponible que ya es común en otros países. En el caso de Carrefour se trata de una experiencia piloto que tendrá un aprovechamiento puntual por las características del mercado, pero que debe ser explorado, como todos los nichos de negocio, para dar satisfacción a una franja cada vez más numerosa de la población consumidora y generar empleo adicional.