Credit Suisse toma ventaja
¿Cuál de los tres mayores bancos de inversión de Europa –Barclays, Deutsche Bank y Credit Suisse– presenta el mejor plan de cambio? Los tres tienen nuevos líderes empeñados en hacer retoques estratégicos. Pero Credit Suisse tiene ventaja.
Las nuevas normas que obligan a los bancos europeos a recaudar más capital o recortar el apalancamiento han provocado una brutal ronda de autoexámenes. Barclays ya ha recortado casi la mitad de sus activos en el mercado de bonos. Incluso Deutsche, que el año pasado amplió una gran porción de capital en un intento de resolver los problemas ha capitulado con eficacia –reduciendo el valor de los activos y el 18 de octubre derrocando a un grupo de altos directivos–. Tanto Deutsche como Credit Suisse han anunciado ajustes este mes.
La cuestión es lo que quedará cuando paren los recortes. Credit Suisse tiene un generador de ingresos importante en forma de su banca privado, que supuso el 33% de sus ingresos brutos el año pasado. Las sinergias de ingresos en los bancos universales suelen ser bobadas, pero sí parecen existir entre las operaciones de gestión de patrimonio y de renta variable. Credit Suisse no solo es el cuarto mayor gestor de patrimonios del mundo, según Scorpio Partnership; Coalition también lo sitúa entre los tres principales bancos de inversión a nivel mundial en el comercio de acciones y sus derivados.
Deutsche, por su parte, solo pudo reunir el 28% de sus ingresos 2014 de sus dos mejores negocios de banca de no inversión. Y Barclays alberga una mezcla de actividades sobre las que las reglas delimitación británicas pueden exponer falta de coherencia.
Aunque Deutsche ofrece en la actualidad buenas cifras en los mercados, John Cryan tiene que trazar una historia de inversión positiva. Barclays, por su parte, no ha sustituido formalmente a Antony Jenkins, su consejero delegado. Por ahora, la ventaja es para Credit Suisse.