Bancos y sindicatos intensifican sus citas para desbloquear el convenio
La Asociación Española de Banca (AEB) y los representantes de los trabajadores de los bancos redoblan esfuerzos para tratar de pactar un nuevo marco laboral para los próxmos años.
“Al menos comenzamos a ver que podemos llegar a un acuerdo a la hora de delimitar cuál es el campo de juego”, resumía ayer un responsable sindical sobre el tono en el que había transcurrido la última reunión de negociación del nuevo convenio colectivo de los bancos.
El avance, aunque somero, refleja una disposición de diálogo entre la Asociación Española de Banca (AEB) y los representantes de los trabajadores del ramo que ni siquiera está clara en el caso de las cajas de ahorro, donde está previsto que la confrontación de paso mañana a las primeras concentraciones de protesta por parte de las plantillas. A fin de evitar un pulso semejante, bancos y sindicatos han decidido potenciar el nuevo modelo de negociación que venían desarrollando en las últimas semanas.
Se trata de encuentros de carácter más reducido y periodicidad más habitual que parecen haber permitido a las partes ofrecer más detalles sobre el fundamento de las líneas rojas planteadas por cada uno.
Así, aunque oficialmente la próxima reunión oficial de negociación no tendrá lugar hasta mediados de noviembre, hasta entonces se sucederán reuniones semanales de este tipo para seguir abonando el terreno de cara a un acuerdo.
Pese a este inicial clima de entendimiento, desde los sindicatos aclaran que las partes no han llegado aún ni tan siquiera a esbozar preacuerdos en ninguna de las áreas de discusión, y que las posturas siguen muy enfrentadas en los temas de mayor calado.
Los mayores focos de fricción son las propuestas de la patronal para convertir en variable ciertos elementos el sueldo fijo, eliminar trienios y beneficios por antigüedad, o crear nuevas categorías salariales inferiores a las actuales. Los sindicatos se niegan, pues la batería supondría reducir a 14.000 euros anuales el sueldo de entrada al sector.
Con todo, el menor interés de los bancos en la ampliación de los horarios comerciales, que sí ha centrado la mayoría de disputas que rodean la negociación del convenio de cajas, hace prever a las partes la posibilidad de terminar alcanzando un acuerdo.
La tensión se concentra en las antiguas cajas
Los tímidos avances que parece estar experimentando la negociación del nuevo convenio colectivo de los bancos o, al menos, su distanciamiento de los periodos de mayor confrontación, despejan de momento parte de la tensión social que amenazaba al sector financiero en bloque. Esta aún rodea con fuerza, sin embargo, el diálogo que mantienen la patronal de las antiguas cajas de ahorro y los empleados de estas entidades a cuenta de su propio convenio. De la reunión que ambas partes prevén mantener hoy dependerá, en buena parte, que dicha tensión se desvanezca o se vea incrementada en los próximos días. Los sindicatos ya han advertido que si no hay un claro acercamiento de posturas mañana mismo iniciarán una escalada de protestas que arrancará frente a las sedes de 12 entidades.