Cómo elegir un diamante
Cuanto más blanca y pura sea la piedra, más cara será Cada año se revaloriza alrededor de un 4%
Hay muchas frases célebres sobre los diamantes, pero si hubiera que elegir la que mejor resume el valor de lo que supone esta piedra preciosa sería la de la cantante y actriz mexicana María Félix: “No son la vida pero cómo quitan los nervios”. Es uno de los valores más solventes que hay en estos momentos. “A diferencia del oro, que sube y baja con demasiada frecuencia, el diamante es un refugio seguro, cuyo precio se mantiene y se revaloriza más de un 4% cada año”, afirma Ignacio de Pilar, uno de los propietarios de Moon Diamonds, la primera boutique de este tipo de piedras que acaba de abrir en Madrid. “España es un mercado muy interesante, y la capital es una ciudad con mucho potencial, además de ser un lugar donde siempre han gustado las joyas finas”, dice de Pilar.
Con más de 20 años de experiencia, Moon Diamonds cuenta con oficinas en las principales bolsas del diamante, como son Amberes, donde está la sede central; Nueva York, Mumbai y próximamente en Panamá City. Además, posee delegaciones en Hong Kong, Dubai, Italia, Alemania, y España, en Córdoba. Detrás de este proyecto a nivel mundial están los hermanos Carlos y Nacho Luna e Ignacio de Pilar. “Invertir en diamantes es una apuesta segura, no estamos hablando de simples joyas, se trata de una inversión, cuyo valor cotiza en bolsa. Y nosotros, al no tener intermediarios, ofrecemos los diamantes más preciados a precio de bolsa, el mejor precio asegurado”, señala Luna. En Moon Diamonds, una vez que el cliente explique su deseo y presupuesto, se elige la mejor opción. Tras haber seleccionado tamaño y modelo, se realiza un prototipo en formato digital, y cuando el cliente da el visto bueno, un artesano empieza a trabajar exclusivamente para él.
Todos los talladores de esta casa de importación y exportación de diamantes están graduados por institutos internacionales del sector. El proceso de elaboración se ejecuta manualmente, además está presente en todas las fases de producción del diamante, desde su extracción, tallado y pulido, hasta su certificación. Todos los diamantes llevan la Certificación Gratuita de los Diamantes, ya que es socio profesional del IGE (Instituto Gemológico Español) y HRD Amberes.
Hay cuatro valores que hay que tener en cuenta a la hora de comprar un diamante: el cut, que mide las proporciones (a mejor proporción en sus medidas más valor); carat, relativo al peso y se mide en quilates (a mayor peso más valor y unicidad); color (cuanto más blanco sea un diamante, más caro será); y clarity, la pureza, la que determina la ausencia o presencia de defectos o marcas internas (cuanto más puro y limpio es un diamante, más brillo y luz refleja, por lo que es más escaso y valioso).