Cómo aliviar el estrés y mejorar el rendimiento en la oficina
Anne Marie Den Broeder es organizadora de eventos dentro de una empresa holandesa del sector financiero. Su actividad está sometida a un elevado estrés que le generaba fuertes dolores de cabeza, malestar que le obligaba a ausentarse de su puesto de trabajo en muchas ocasiones. Hace cuatro años comenzó a practicar yoga, una herramienta con la que ha conseguido aliviar sus cefaleas a la vez que encontrar una manera equilibrada de afrontar su trabajo diario. No es un caso aislado. Porque, según datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), uno de cada diez adultos sufre de estrés, depresión, ansiedad o cansancio crónico, y predice un aumento drástico de esta cifra debido al modo de vida actual. Uno de los colectivos sometidos a un elevado estrés son los profesionales y directivos, debido a la enorme carga laboral y a las altas exigencias y responsabilidades que desempeñan.
“Por desgracia, la sociedad actual nos ha hecho creer en un modelo de empresa que asocia la productividad y la eficacia a un sistema de trabajo agresivo y agitado”, explica Alejandra Vidal, responsable de Corporate Yoga España, organización que imparte clases a ejecutivos y profesionales y autora del libro Yoga para ejecutivos (Profit Editorial), que se presenta hoy en Espacio Yoga en Barcelona. Esta experta asegura que mediante esta actividad pueden desmontarse todos estos tópicos, pues su práctica en las empresas promueve una gestión positiva del estrés para evitar la sobrecarga de tensión y favorecer una efectiva toma de decisiones.
Ejercicios de silla
Una sencilla rutina en el puesto de trabajo puede ayudar a liberar tensiones y refrescar la mente sin levantarse de la silla.
Un ejercicio fácil de hacer es el de la postura de la montaña: en la silla se separa la columna del respaldo y se estira, se acerca la barbilla al pecho y la coronilla hacia el techo. Se relajan los hombros y se separan los labios. Se colocan las manos sobre las rodillas con las palmas abajo y se apoyan los pies en el suelo separados como el ancho de las caderas. En esta postura se hacen tres respiraciones abdominales.
Estirar el cuello es obligatorio: se inhala al comenzar a hacer círculos con el cuello hacia el lado derecho, manteniendo los hombros relajados y exhalando en el centro. Se repite en el lado izquierdo.
Por esta razón, apunta Vidal, cada vez son más las empresas, como Google, Roche, L’Orèal, Ikea, Alstom o Privalia, que ofrecen a sus empleados y ejecutivos lecciones de yoga, ya que se ha demostrado que tiene un efecto inmediato en el rendimiento y productividad de todos ellos.
Dedicar un momento al yoga durante la jornada laboral es parar la vorágine para conectar con el momento presente, descansar la mente y estirar el cuerpo. Por ejemplo, ayuda a lograr mayor claridad mental antes de afrontar una reunión, además de soltar tensiones.
“La práctica de yoga combina la ejecución de ciertas posturas (asanas) con ejercicios de respiración y técnicas de meditación y relajación que estimulan el riego sanguíneo”, expone en su libro Vidal, que asegura que todo ello es excelente para la memoria y el aprendizaje, además de mejorar las capacidades cognitivas como la velocidad de reacción, o la capacidad de mantener la atención enfocada en las tareas que se están realizando.
También libera el cuerpo de tensiones y otorga una mayor conciencia de las emociones, además de que las técnicas de respiración permiten serenar la mente. Todo ello conlleva un aumento de la productividad, y una mejora en la toma de decisiones, en sintonía con los valores de la organización para la que trabaja. Por otra parte, ayuda a generar buen clima laboral, debido a que genera un ambiente de trabajo más positivo y una mayor asertividad en la forma de trabajar.
El yoga ayuda a ser más disciplinado, a entrenar la mente para enfocarse en lo factible, “es una excelente herramienta para eliminar lo superfluo y centrarse en lo realmente importante”, explica Alejandra Vidal. Otro de los beneficios, según apunta en el libro, es el fortalecimiento del sistema inmunológico, así como la liberación de endorfinas, relacionas con el bienestar. Por último, una mente en calma favorece la creatividad y la innovación en las empresas.