Las telecos europeas ofrecen su dividendo ante el crash emergente
El agravamiento de la crisis en China y otros mercados emergentes como Brasil ha provocado una fuerte caída de las Bolsas desde principios de agosto. En estas circunstancias, las telecos europeas, penalizadas por este entorno, tratan de alejar incertidumbres y buscan hacer valer su posición en las políticas de retribución al accionista.
En un informe publicado la pasada semana, con el título “Safe haven, with growth & yield”, Barclays defiende que las telecos europeas ofrece una sólida defensa con una rentabilidad por dividendo media del 5%. Estos analistas creen que la situación actual de preocupación sobre el crecimiento económico global, junto con bajos tipos de interés, concede atractivo a la retribución a los accionistas, aprobada por las distintas telecos, que además ofrecen potencial de crecimiento.
Según el ranking de Barclays, TeliaSonera tiene la previsión de mayor rentabilidad por dividendo entre los incumbentes para 2015 con un 6,7%, por delante de Telefónica y la danesa TDC con un 6,1% cada una. Orange tiene un 5%, Vodafone un 5,2% y Deutsche Telekom un 3,5%. Para 2016, la previsión para TeliaSonera es del 7,1%, por un 6,8% de Telefónica, un 5,6% de Vodafone, un 5,4% de Telenor, un 4,7% de Orange, y un 4,1% de Deutsche Telekom.
De igual forma, el informe de Barclays destaca el crecimiento estructural, aunque todavía modesto, del conjunto de las empresas gracias a la progresiva rentabilización del negocio de datos móviles, una actividad considerada clave para las compañías del sector.
Estos analistas creen que las telecos están redescubriendo el poder de los precios junto a la clara demanda por una mayor velocidad en los servicios de datos. Además, insisten en que los despliegues de las redes de 4G y la mayor popularización de los smartphones están impulsando el uso de los servicios de internet en el móvil. Así, destacan que en países como Reino Unido u Holanda el uso de los datos se está duplicando año a año.
En su opinión, tras muchos trimestres de caídas, los ingresos de las empresas del sector están en un punto de inflexión. “Los ingresos de los servicios móviles están casi planos mientras que en los servicios fijos están registrando tasas positivas”, destacan estos analistas, que indican que todos los incumbentes europeos, con excepción de la holandesa KPN y la danesa TDC, registraron un volumen de negocio en sus mercados domésticos por encima de las previsiones del mercado en el segundo trimestre.
Al mismo tiempo, el estudio de Barclays destaca que la gran mayoría de las operadoras europeas están poco expuestas a los mercados emergentes. Así, grupos como KPN, Swisscom y TDC_logran todos sus ingresos en el Viejo Continente en Europa, mientras que en el caso de BT, el Viejo Continente supone el 90% de su volumen de negocio.
Orange, por su parte, capta en Europa cerca del 69% de sus ingresos en el Viejo Continente, mientras que Deutsche Telekom y Vodafone superarn el 50%. Telefónica, con cerca de un 40% de los ingresos procedentes de Europa, y Telenor, con más de un 30%, son las telecos con mayor actividad fuera del continente europeo.
El sector, además, ha apostado por un mejor escenario regulatorio a propósito de la creación del mercado único digital. Aunque algunas sombras planean las operadoras, especialmente en lo referente al proceso de consolidación. La decisión de TeliaSonera y Telenor de cancelar la fusión de sus filiales en Dinamarca por la falta de acuerdo con la Comisión Europea ha provocado la aparición de nuevas incertidumbres ante la aprobación de otras operaciones.
Adiós al rally en Bolsa
Hasta principios de agosto, la mayoría de las telecos europeas podía presumir de haber registrado un rally en Bolsa desde principios de año. Pero desde mediados del mes pasado, con el agravamiento de la crisis china y de otros mercados emergentes, las operadoras han sufrido un duro castigo en los mercados, dentro de las caídas generalizadas que han sufrido las Bolsas, que les ha llevado a entrar en territorio negativo en su evolución anual.
Así, por ejemplo, Telefónica registró el 6 de agosto un máximo anual de 14,3 euros. Pero, desde entonces, las acciones han caído un 19% hasta 11,55 euros. Con esta evolución, los títulos acumulan una bajada anual del 1,99%. Telefónica, no obstante, ha insistido en que, pese a las dificultades económicas en el país, será capaz de mejorar sus operaciones de la mano de GVT, comprada este año.
La evolución de otras compañías ha sido incluso peor. Orange, que este verano cerró la adquisición de Jazztel, cede un 2,5% desde enero; TeliaSonera se deja un 7,2%, mientras que TDC ha bajado un 20%. Vodafone está prácticamente plana y avanza desde principios de año un 0,58%.
Por el contrario, las mejores empresas son Telecom Italia y Deutsche Telekom, con un avance del 235 y el 17%, respectivamente. No obstante, las acciones de la operadora alemana llegaron a acumular durante este verano una revalorización superior al 30%.