Ejecutivas, ¿ejemplo a seguir por las empleadas?
Algunas mujeres con cargos de alta responsabilidad se toman poco descanso tras el parto. Los padres asumen cada vez más peso en la baja.
La consejera delegada de Yahoo!, Marissa Mayer, anunció la semana pasada que está embarazada de gemelas. Y que, igual que hizo con su primer hijo, piensa tomarse solo dos semanas libres desde el momento en que dé a luz. Entonces, en 2012, ya suscitó en EEUU un acalorado debate, entre quienes la ponían como ejemplo de que una mujer puede seguir con su carrera tras parir, y los que la criticaban por suponer un ejemplo poco realista para las madres trabajadoras.
“No es posible equiparar las circunstancias de una directiva como Mayer con el resto mujeres de la plantilla”, opina Ana Bujaldón, presidenta de la Federación Española de Mujeres Directivas, Ejecutivas, Profesionales y Empresarias (Fedepe). “El puesto que ocupa le puede haber animado a no desligarse del ámbito laboral, pero su cargo le ofrece ayuda profesional de cuidados, teletrabajo y horarios flexibles”, apunta.
La vicepresidenta que renunció al reposo
Soraya Sáenz de Santamaría no faltó en el balcón de la sede del PP de Génova durante la celebración de la arrolladora victoria de su partido en las elecciones generales de 2011. Ni siquiera el hecho de haber dado a luz apenas cinco días antes frenó a la actual vicepresidenta de reunirse esa noche con sus compañeros.
Unos días más tarde ya estaba trabajando codo con codo con el presidente, Mariano Rajoy, en la configuración del nuevo Gobierno. Sáenz de Santamaría y su marido decidieron que este último se ocuparía de la alimentación y cuidados del bebé. Ella no guardó las seis semanas de reposo obligatorio.
No hace falta desplazarse hasta Norteamérica para encontrar casos de este tipo. La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, dio a luz el pasado 30 de julio. No hizo público cuánto tiempo estaría de baja, aunque sí dijo que compartiría el permiso de maternidad con su marido. Su entorno más cercano situó su descanso entre las cinco o seis semanas y recientemente se ha confirmado que la socialista hará campaña para las elecciones catalanas del 27 de septiembre. Su decisión de acortar el tiempo de baja ha sido objeto de quejas por diversas asociaciones y particulares, al considerar que ese gesto le hace un flaco favor a la lucha por los derechos de las madres trabajadoras.
¿Qué dice la Ley? Las mujeres tienen derecho a una baja maternal de 16 semanas ininterrumpidas. El permiso es retribuido y las seis primeras semanas son de “descanso obligatorio”, de acuerdo con la normativa actual.
Según el último dato de la Seguridad Social, entre enero y junio se han concedido en España 140.587 prestaciones de maternidad, un 0,5% más que en el mismo periodo del año pasado. Lo curioso es que la proporción de hombres que ejercen su derecho a compartir el permiso con sus parejas ha crecido un 7,3% en esa misma etapa. Conclusión: ellas acortan su baja en beneficio de que ellos se puedan apuntar a disfrutar del descanso. Aun así, el 90% de los permisos de maternidad son solicitados y concedidos por las madres, lo cual se riñe con la corresponsabilidad y el reparto equilibrado de tareas.
Las mujeres que han llegado a puestos directivos aseguran que su sexo las sitúa en desventaja frente a sus colegas masculinos. Un 40% de las directivas opina que los prejuicios de género son un obstáculo en su promoción profesional, según un estudio elaborado por la consultora Grant Thornton. De acuerdo con dicho informe, publicado en marzo de este año, solo un 26% de los puestos de dirección en las empresas españolas medianas y grandes están ocupados por mujeres. La cifra iguala la media europea, pero se queda muy por detrás de países como Rusia (40%), Polonia (37%) o Francia (33%).