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Columna
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Un respiro para BP y Total

El pronunciado descenso del precio del petróleo no es del todo malo para las grandes empresas petroleras integradas. Los fuertes resultados en las divisiones dedicadas a refinería y marketing limitan la caída de los beneficios tanto en BP como en Total en el primer trimestre de 2015. Con el precio del barril de Brent a la baja un 50% con respecto al año anterior, estas ganancias son bienvenidas. Pero puede que no se prolonguen.

La compañía británica informó de un beneficio subyacente en el primer trimestre de 2.600 millones de dólares (2.360 millones de euros), casi el doble de lo que los analistas esperaban. Es una reducción relativamente modesta del 20% con respecto al año anterior.

Los precios del petróleo podrían restringir la oferta, pero estas compañías están impulsando la producción

La refinería fue mejor de lo esperado en BP. Los costes del crudo–cayeron más que el precio de la gasolina y otros productos. En la francesa Total, los ingresos netos ajustados de refinería y químicos se multiplicaron por más de tres desde el primer trimestre del año pasado a 1.100 millones de dólares.

Los precios del petróleo más bajos podrían eventualmente restringir la oferta, pero BP y Total están impulsando la producción: Total en un impresionante 10%. Sin embargo, el bajo precio del petróleo está perjudicando el flujo de caja. Tras unos más que generosos ajustes en el capital circulante y los pagos por el vertido en el Golfo de México, el flujo de caja operativo de BP era alrededor de 5.000 millones de dólares, menos de los 6.000 millones desembolsados en los inversiones y dividendos. La relación entre deuda neta y capital total llegó hasta un 18,4%, acercándose al objetivo de la compañía del 20%.

Para sostener los dividendos, es imprescindible mantener el gasto bajo control. Los inversores creen que BP y Total están en el camino correcto. Sus acciones han subido en torno al 17% este año –mejor que los rivales–.

La especulación de que BP podría ser un objetivo de adquisición, pese a la resistencia de la política británica, podría haber ayudado a las acciones. Pero el mercado no se está dejando llevar. Morgan Stanley calcula una rentabilidad por dividendo de un generoso 5,5% de BP en 2015. En Total es del 5,1%. Parece más o menos adecuado para empresas que permanecen en urgente necesidad de auto ayuda.

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