El ‘pelotazo’ de inventar el viagra femenino
Existen muchos fármacos que ayudan a las disfunciones sexuales del hombre, sin embargo no se comercializa ninguno para la mujer. La historia real de una mujer ha puesto en marcha campañas de apoyo para que se aprueben los tratamientos femeninos para mejorar la vida sexual de las mujeres.
Por todos es conocido el viagra masculino para combatir la impotencia en los hombres. Sin embargo, existen trastornos sexuales en las mujeres que hasta ahora no se tratan, y tampoco se exponen tan abiertamente. Una mujer ha explicado su experiencia y cómo su vida ha cambiado desde que ha comenzado a tomar este fármaco que devuelve el apetito sexual.
Bárbara es una mujer que asegura haber tenido un matrimonio pleno sexualmente a lo largo de 40 años. El problema viene cuando perdió la libido. En ese momento explica que se sintió frustración, vergüenza y angustia, por lo que acudió al médico donde la diagnosticaron trastorno de deseo sexual hipoactivo (TDSH). "Avanza hasta un punto donde no te comunicas más con tu pareja. Muchos matrimonios terminan por este problema. Es una condición espantosa", ha declarado Bárbara en una entrevista para la BBC.
Apoyo para que se apruebe el viagra femenino
Consciente del problema, Bárbara se decidió por poner solución participando en un tratamiento experimental de flibanserin. Esta droga ha sido rechazada en un par de ocasiones y se está sometiendo a nuevas pruebas. Según asegura Bárbara funciona y “salvó mi vida”. Este testimonio unido al de otras mujeres en la misma situación son los que están presionando para que el fármaco salga al mercado. Existen multitud de marcas y compuestos para los problemas sexuales en los hombres y ninguno para las mujeres. De hecho, se ha abierto una campaña que defiende la aprobación de este tipo de tratamientos y, en concreto, de la pastilla que utilizó Bárbara. La campaña Even the Score promueve la igualdad de género y una de las especialistas de disfunciones sexuales y asesora de la campaña ha defendido que "la pastilla es para aquellas mujeres diagnosticadas con TDSH", y que “de ser aprobado, el tratamiento puede convertirse en una opción para aquellas mujeres que no puedan tomar hormonas”.
Un negocio redondo al que lo consiga
Como en todo, hay argumentos en contra de que este fármaco salga a la luz. Los que se postulan en contra de la campaña hacen alusión a la faltad efectividad y a que es una manera de “simplificar la sexualidad femenina”. En cualquier caso, hay 26 tipos de tratamientos distintos para las disfunciones sexuales masculinas y ninguna para las femeninas, lo que pone de manifiesto que flibanserin o el primero que consiga comercializarlo logrará un negocio único.