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Columna
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El dulce legado de Michele Ferrero

Michele Ferrero deja un imperio de más de 25.000 millones de dólares (alrededor de 21.900 millones de euros). El confitero, que falleció el fin de semana a los 89 años, tenía un don para la creación y comercialización de golosinas y construyó la mayor fortuna de Italia a base de Nutella, huevos Kinder y Tic Tac.

A diferencia de los bolsos de Prada y los coches deportivos Ferrari que están detrás de otras fortunas italianas, Ferrero vendía lujo asequible. Nutella, producto desarrollado por su padre Pietro después de la Segunda Guerra Mundial, unió el caro cacao con las avellanas que abundaban en el norte de Italia. El bajo perfil de Michele también era todo lo contrario a, por ejemplo, Armani o Berlusconi.

En otros aspectos, el jefe Nutella era tradicional. Su firma homónima era una empresa muy familiar. Tenía la ética de trabajo de un empresario y apreció que la empresa tenía que salir de Italia. Nutella llegó a las tostadas estadounidenses en 1983.

¿Qué tamaño tiene ahora el Grupo Ferrero? Sus cuentas hasta agosto de 2013 arrojaron un Ebitda anual de 1.300 millones de euros. Año y medio después, el flujo de caja estará probablemente cerca de los 1.400 millones de euros. Eso sugiere un valor de casi 20.000 millones de euros. Pero cualquier valor de venta estaría seguramente miles de millones por encima.

Sin embargo, Giovanni, hijo de Michele y único presidente ejecutivo desde la muerte de su hermano en 2011, insistió hace dos años: “Nacimos de una empresa familiar y tenemos la intención de seguir siéndolo”. Si bien las peleas entre facciones pueden empujar a algunos grupos familiares a vender, hay un fuerte control y el negocio no requiere capital.

Una salida a bolsa sería más plausible. La mayoría de las acciones son de accionistas de control y las nuevas normas que dan votos adicionales a los titulares a largo plazo son especialmente amables para los debutantes en el mercado. Pero es más probable que el legado de Michele Ferrero –y sus valores de autosuficiencia– perduren.

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