Cuándo debe una startup evitar nuevas contrataciones
Encontrar el profesional que mejor encaje en tu startup puede ser tan difícil como encontrar el mercado que mejor se ajuste a tus productos. Estos cinco supuestos te servirán de guía para ser prudente en tus contrataciones.
Adaptación del texto original publicado por Tom Lueng en VentureBeat.
Cuando eres propietario de una startup en etapa temprana, una de tus prioridades es crear un gran equipo. Tanto inversores, como clientes e incluso amigos y familiares no paran de interesarse por el número y el tipo de empleados, y todo ello unido al entusiasmo de poner en marcha tu idea, y al deseo de dar una buena imagen, hará que tiendas a incorporar a nuevos empleados a tu negocio.
Hace unos años, Ben Huh, CEO de Cheezburger Network, me dijo unas palabras que realmente llamaron mi atención: “En la fase de inicio, cuando todavía no hayas encontrado un mercado que se ajuste a tus productos, no contrates a nadie a menos que sea ‘verdaderamente imperioso ocupar un determinado puesto’.
Para una startup en fase temprana, el coste que supone la incorporación permanente de otro miembro en el equipo, el riesgo de que esa persona no sea la más adecuada, y la posibilidad de que tal contratación pueda impedir otra más importante a corto plazo, representan factores de gran peso. No se trata solo del riesgo a equivocarte en la elección del candidato, sino que todo ello podría llevar al fracaso a tu empresa. En las primeras etapas, cada nueva contratación tiene que suponer un punto de inflexión en el negocio. De lo contrario, perderás el tiempo y el dinero.
Según mi experiencia, estos son cinco supuestos que podrían resultar bastante atractivos a efectos de contratación, pero que generalmente deberías evitar a menos que dicha incorporación vaya a suponer un cambio del 30% como mínimo en los principales indicadores de rendimiento del primer mes.
Se trata de alguien famoso o con un historial destacado
La idea de una "contratación trofeo" es muy tentadora. Las cuestiones a valorar en este tipo de supuesto deberían ser: "¿Son buenas las intenciones de dicha persona al interesarse por tu empresa?, ¿su visión y perspectiva coinciden con las tuyas, y se encuentra preparada actualmente para incorporarse a una startup en fase previa de expansión?, y sobre todo, ¿su incorporación es lo más importante para la startup en estos momentos?.
Se trata de una recomendación del equipo
En este caso se presenta una situación complicada porque te encuentras ante la posibilidad de incorporar en el negocio a alguien con referencias y recomendado por algún miembro de tu propio equipo. Podría tratarse de un profesional que verdaderamente encajase en la empresa. Pero, hay que actuar con prudencia ya que estas contrataciones “oportunistas” pueden ser peligrosas y lo más razonable es hacer una evaluación previa para constatar que, en efecto, esa persona va a aportar valor suficiente a la startup y que la recomendación no tenía como objetivo simplemente proporcionar un poco más de vida al equipo. Tal vez tu presupuesto para este trimestre solo permita un nuevo empleado, ¿merece la pena arriesgarte?.
Es alguien que ha captado tu visión de futuro
Dedicas un montón de tiempo a hacer ver por qué tu startup es especial, y la mayoría de veces no consigues calar o despertar tu vocación en los demás. Y de repente surge esa persona, que suele ser un usuario experto de tu empresa, y logra captar tu visión de futuro.
Por muy impresionante que te resulte, contratar a esa persona es algo que te podrías permitir si fueras una empresa mucho más madura y estable. En una etapa temprana, no puedes contar con el margen o el presupuesto suficiente para este tipo de contrataciones "oportunistas".
Se trata del profesional que te faltaba
Hay ciertos cargos en las startups, y que no están presentes en tu equipo, que parecen ser cruciales para el éxito del negocio, los blogs o tuits no paran de recordártelo. ¿Tienes un informático experto en crecimiento, o un desarrollador de dispositivos móviles, o un científico de datos?.
Podría ser tentador contratar a alguien para alguna de estas funciones, porque sabes que más adelante terminarás necesitándolo. Sin embargo, lo sensato es esperar y hacerlo cuando llegue el momento. Ahora, limítate a formar un equipo más reducido que te permita desarrollar un verdadero negocio. Cuando forzosamente necesites un científico de datos, será algo obvio.
Acabas de recaudar financiación
Esto no significa que tengas que gastar ese dinero de inmediato, aún cuando les dijeras a tus inversores que lo necesitabas para ampliar el equipo. Solamente tú conoces lo que de verdad necesitas en este momento. No te lances a contratar a alguien por el simple hecho de cumplir a rajatabla todo el proceso que, según tú, debería seguir una startup en crecimiento, en un intento por alcanzar el máximo valor de mercado.
Al fin y al cabo, esta podría haber sido la última ronda de financiación; por tanto, no contrates a nadie a menos que vaya a ser crucial para tu negocio. La contratación de esta persona probablemente te hará depender en mayor medida de futuras recaudaciones de capital.