La mitad del empleo de las nuevas empresas desaparece a los 5 años
Un informe de la Fundación BBVA e Ivie desvela que el futuro del país por compañías más grandes para que garanticen la competitividad
El efecto de la crisis ha calado muy hondo entre el tejido empresarial del país. De cada cien puestos de trabajo generados por las nuevas compañías durante este periodo de tiempo, cinco años más tarde apenas se mantenían la mitad (55), según desvela un informe elaborado por la Fundación BBVA e Ivie. Estos datos no tienen nada que ver con los que ofrecen otras potencias de la Unión Europea como Alemania, que conservaba 75 empleos, frente a los 68 de Italia.
El motivo de todo esto es la gran mortalidad empresarial y la menor capacidad de estas compañías para crear empleo. En el caso de los autónomos, estos tienen muchos más problemas para mantener los puestos de trabajo, ya que en el periodo comprendido entre 2007 y 2012, el 73% apenas llega al año y solo la mitad aguanta los tres años.
En este estudio aseguran que el pequeño tamaño de la empresa es todo un problema, ya que se frena el crecimientod el empleo y se limita su productividad. El año pasado las empresas de mayor tamaño ya habían recuperado el empleo perdido durante la crisis colocándose en cifras similares a las de 2006, mientras que las pymes sólo conservaban el 80%.
España se caracteriza por contar con un tejido empresarial muy amplio y de reducidas dimensiones. El 94% son microemrpesas con menos de nueve trabajadores que generan el 39,5% de los trabajos; el 6,1% son pymes (hasta 249 empleados), que generan el 35% del empleo, mientras que las grandes empresas, que suponen el 0,1% del total, crean el 25,6% de los puestos de trabajo.
El informe aprecia una serie de carencias preocupantes en lo que se refiere a la formación de los trabajadores autónomos, ya que su preparación básica y financiera es escasa y en muchas ocasiones pone en peligro la viabilidad del negocio. Advierte de que el 43,5% de estos trabajadores por cuenta propia únicamente cuenta con estudios básicos, cuando en la media de la Unión Europea se reduce al 23,8%.
Otro aspecto a tener en cuenta es la necesidad de reforzar la presencia de las compañías en las actividades de I+D+i. La inversión de las empresas españolas solo es del 53% frente al 63% de la UE.